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«EN PLENO CONTACTO»: La ley 3 de 3 no quedó ni dos dos

El PRI se repite la historia

¡Soy un resentido social!, afirmó Ariel Juárez, diputado federal por el grupo parlamentario de Morena en la Cámara de Diputados, donde presentó reservas al artículo 61 de la Ley Anticorrupción conocida como Ley 3 de 3 que no quedó ni dos dos.

Y es que el pasado miércoles durante el segundo periodo extraordinario de sesiones de esta LXIII legislatura, se dio entrada al dictamen aprobado por el Senado de la República, durante su intervención en la máxima tribuna, Ariel Juárez sacó los “trapitos al sol” del por qué tienen que presentar su declaración tres de tres los empresarios.

“Fíjense nada más, qué chulada tenemos aquí –expresó el morenista– durante el gobierno de Moreira: la deuda pasó de 323 millones a 36 mil millones, y está impune. Padrés, porque el PAN tampoco se salva: playa privada, de más de unos 115 millones de pesos esto se le llama corrupción”.

Y continuó arrasando con todos panistas y priistas donde se refirió frontalmente a los legisladores mexiquenses y diputados federales.

“El presidente del partido del PRI (César Camacho), del grupo parlamentario, cuando fue presidente del partido, recibió contratos por alrededor de 10 millones de pesos, de tres municipios: Metepec, Carolina Monroy del Mazo, Tlalnepantla, Pablo Basañez, y Huixquilucan, Alfredo del Mazo Maza, empresa que se dedica a dar, según El Universal, asesoría legal de comunicación social y de manejo de imagen en el gobierno mexiquense en el tiempo que él fue presidente del partido.

Esta información la he sacado de los medios como Proceso, La Jornada, El Universal, El Financiero. En éstos que han sacado todo este asunto". Siguió con los sarcasmos:

“Otra de las chuladas que tienen ustedes en esta cuestión es lo de Grupo Higa. Fíjense nada más la casa blanca, OHL, que son los contratistas preferidos de este gobierno y que esta casa no la tiene ninguna de las actrices de Hollywood más destacadas.

Oro negro que tiene que ver con el hijo del exsecretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, los exdirectores de Pemex del PAN, Luis Ramírez Corzo y Juan José Suárez Coppel, Gilberto Pérez Alonso, quien fue vicepresidente de Televisa y Alberto Cortés, dueño de la constructora española ACS, asociada con Grupo OHL, donde trabajó Emilio Lozoya. Ese grupo de empresarios que fue a bocabajear a su presidente, son a los que ustedes deberían de estarles reclamando y gritando.

Y miren nada más con qué chulada cerramos mi intervención, para que no les cause resquemor, porque sólo así los tengo sentaditos y capto su atención. Los organismos empresariales públicos que tanto decían ustedes que ya no eran viables para el país, Telmex, comprado por Carlos Slim, el hombre más rico del mundo”.

Por eso se autodenomina resentido social, ya que minutos más tarde en su muro de Facebook, recibió reclamos de la secretaria del PRI, Carolina Monrroy, quien se manifestó y lo llamó resentido social y se lo adjudica el legislador de Morena porque asegura ¡soy resentido social! Pero no pretendo desestabilizar ni saquear al país como lo han hecho los priistas del Estado de México.

No obstante, la Ley 3 de 3 dio paso a una serie de descalificaciones entre priistas y panistas. Ricardo Anaya recordó las acciones que pretenden los gobiernos de Javier Durarte, gobernador de Veracruz y Roberto Borge de Quintana Roo, para la asignación mediante el aval de congresos locales los fiscales anticorrupción a modo, que hoy están en la mira, por las denuncias de empresas fantasmas en ambas entidades.

Y por la Intención de blindarse contra cualquier acción de la justicia por parte de gobiernos de oposición al haber perdido el PRI en sus entidades.

Y el PRI revira en voz de su secretaria general Carolina Monroy, recordó él gobierno de Guillermo Padrés y a la chapodiputada Lucero Sánchez recién desaforada por sus vínculos con el narcotraficante Joaquín “El Chapo" Guzmán.

Elección del líder priista-PAN con lo mismo
La gran farsa del PRI en la elección de su presidente, luego de dos semanas donde nadie levantó la mano tras la renuncia de Manlio Fabio Beltrones, la semana pasada la hace Enrique Ochoa ahora exdirector de Comisión Federal de Electricidad (CFE).

Un día antes, Carolina Monrroy anunciaba la publicación de la convocatoria, y el jueves 7 de julio en el Senado de la República, luego de una reunión de trabajo, en entrevista, Enrique Ochoa manifestó: “Sería un honor ser presidente del PRI”.

¡Zas! Para el viernes ya se había reunido con la dirigencia de la CTM, y un fin de semana de campaña, con la CNOP, CNC sectores Fuertes del PRI.

Pero, ¿qué hay detrás de todo el show del tricolor? La imposición de los priistas mexiquenses a nivel nacional. Carolina Viggioano, diputada federal por Hidalgo, negó que haya confrontación entre hidalguenses y mexiquenses por el poder, hecho que ha sido por demás visto, desde el interior del gabinete, Ángel Osorio Chong, secretario de gobernación, quien dentro de su dependencia ha tenido que soportar a Luis Miranda subsecretario.

Y es que con Enrique Ochoa que ayer, fue registrado, y electos de manera exprés cuando se esperaba que fuera el fin de semana próximo; quien se fortalece es el secretario de Hacienda Luis Videgaray quien busca ser candidato en el 2018. Hubieron voces al interior del priismo quienes no les pareció la forma en que se llevó a cabo el proceso.

Uno de ellos, el exgobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz, exigió que sea el líder del PRI, integrante de la militancia, pero ¿qué calidad moral tiene Ulises Ruiz para sugerir tal propuesta? Primero no es mexiquense y luego, su gestión en el gobierno de Oaxaca deja mucho que desear.

Es así como se deja claro que dentro del PRI se repite la historia: tecnócratas como en el caso de Carlos Salinas de Gortari,de tecnócratas contra dinosaurios y ahora la situación no varía mucho.

Pero las prácticas son las tradicionales la cargada a favor de Enrique Ochoa como en los mejores años del PRI. Queda más que a la luz las diferencias entre Manlio Fabio Beltrones y el presidente de la República, Enrique Peña Nieto.

 

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