Columna invita Sobre la Línea
Sobre la línea
“Paseando por Río”
Por Jorge Rubio
Vaya que he recorrido la ciudad de Río de Janeiro en tan solo 3 días, y no tanto
porque yo así lo haya deseado, en realidad, el tema del transporte se me ha
complicado un poco.
Desde mi primer día en Río, me puse a trabajar, fui al centro de medios para
cambiar mi pre-acreditación por la…acreditación, en realidad es lo mismo pero con
mica y un bonito cordón de los Juegos Olímpicos. Cuando hice este proceso, me
dieron como cortesía, dos tarjetas de BRT, osea, una especia de metrobus que
aún no abre todas sus estaciones, pero que es una de las formas más rápidas
para viajar en esta conflictiva Ciudad, hablando solamente del transporte.
Como buen extranjero, busque rápidamente un mapa, en donde pude ver el
recorrido del BRT, y que como buen extranjero, sigo sin entender del todo.
Tras un día de lograr llegar sin problemas a mi destino, y como diría mi querida
Paty Betaza, haciéndole al “Canelas”, por mi mente paso: Yo ya sé cómo moverme
aquí. Grave error!! No me baje en la estación que corresponde al Centro de
Prensa (MPC) y me lamente, pero dije, esta bien, ya la regaste, bájate en la que
sigue, y como les mencione antes, hasta el día 5 de Agosto se habilitaron todas
las estaciones; ahí me tenían, viendo como cada vez me alejaba más y más de la
Ciudad, cuando vi una especie de caseta, cerros y algunas favelas fue cuando me
comencé a enojar, claro, conmigo, con quien más, no tenía a quien culpar más
que a mí.
Por fin, tras 20 minutos de no saber en donde podría bajarme para volver al MPC,
se detuvo el BRT y volví al lugar al que iba originalmente.
Ese mismo día, pero más tarde, fui a entrevistar a Alejandra Terán, esgrimista
olímpica mexicana, llegué a tiempo, sin problemas, pero la entrevista la termine
hasta las 9 de la noche y yo tenía que regresar al Centro de Prensa rápido, para
grabar mis enlaces para los noticieros de México al Día, que por cierto pueden ver
a las 6:30,14:30 y 21:00 hrs. Entonces corrí a uno de los autobuses que
proporciona el Comité organizador, para que me llevara al MPC, pero hay un
detalle, los camiones tienen dos letreros leds, uno que dice a donde va en
realidad, con un código raro y el otro que no sé para qué demonios está.
Obviamente vi el letrero que decía MPC y me subí, a los 5 minutos de trayecto, me
di cuenta que nuevamente me había equivocado y tuve que llegar hasta el destino
final del autobús, bajarme, subirme a otro, y por fin llegar al bendito MPC.
Sí, el transporte en Río de Janeiro es muy complicado, no hay muchas rutas, pero
como buen periodista, siempre buscaré una rápida solución, un Uber o Taxi
Bueno, así las cosas acá en Río de Janeiro, en donde no solo se cuentan historias
de los deportistas, también, les puedo contar mi historia y la de muchos
periodistas que buscan una noticia que le de alegría a su país.
Me despido por el momento, mientras sigo “Paseando en Río”.