Un debate que promete ser debate. Tres periodistas como moderadores para la hora con 54 minutos que deberá durar el primer cara a cara de los tres hombres y una mujer que aspiran a gobernar el país. El INE pretende romper con los formatos acartonados del pasado. Por lo pronto la inclusión de la conductora estelar de Televisa, Denise Maerker, de Milenio, Azucena Uresti, y Sergio Sarmiento promete un intercambio de ideas más fluido, con la posibilidad de interrumpir y realmente cuestionar a los candidatos.
El primer de los tres debates tendrá como sede el Palacio de Minería el domingo 22 de abril. Comenzará a las 8 de la noche. Previamente, el lunes 16 el INE sorteará el orden de aparición de los candidatos. El tema: “Política y Gobierno”. Los ciudadanos también podrán participar mediante encuestas y sondeos. Serán dos segmentos divididos en cuatro bloques. Cada una de las intervenciones de los candidatos durarán 2 minutos y medio. El Segundo debate está programado para el 20 de mayo en Tijuana y el tercero el 12 de junio en Mérida, los mecanismos para ambos, están por definirse.
Los debates presidenciales en nuestro país comenzaron en 1994. Entonces participaron Ernesto Zedillo por el PRI, Diego Fernández por el PAN y Cuauhtémoc Cárdenas por el PRD. Los analistas y sondeos dieron por claro ganador al Jefe Diego. Es recordado ese debate por la paliza verbal que les acomodó Diego al adusto y parco Cárdenas y a un Zedillo con la sonrisa nerviosa y congelada. El Jefe Diego se “desapareció” de la arena política. Zedillo ganó las elecciones.
En el 2000 se enfrentaron en un primer debate Francisco Labastida por el PRI, Vicente Fox por el PAN, otra vez Cuauhtémoc Cárdenas, Porfirio Muñoz Ledo, Gilberto Rincón Gallardo y Manuel Camacho Solís. Luego un segundo debate ya solo con tres, Fox, Cárdenas y Labastida. Célebre el necio “hoy, hoy… hoy” de Fox y por la desafortunada frase de Labastida de “Me dice mariquita…..me dice la vestida…”. Fox ganó la presidencia.
En el 2006 se enfrentaron Felipe Calderón, Roberto Madrazo, Patricia Mercado y Roberto Campa. Es recordado por el desdén de Andrés Manuel López Obrador y hay quienes opinan que le costó la presidencia. Ganó Calderón las elecciones.
En 2012 se enfrentaron Enrique Peña Nieto, Andrés Manuel López Obrador, Josefina Vázquez Mota y Cuadri. El debate es más recordado por el escote de la edecán que dejó con los ojos cuadrados a los candidatos. La figura mediática de Peña tenía todos los números favorables y ganó con holgura la presidencia.
Así las cosas, el debate es ampliamente esperado, tal vez más por el círculo rojo que por los ciudadanos porque este es un ejercicio que tiene apenas 24 años. Hasta la elección presidencial pasada, los “debates” eran muy esquemáticos. Un moderador contabilizando el tiempo, uno a uno de los candidatos exponiendo sus temas y poca interacción entre ellos.
Los debates presidenciales comenzaron en Estados Unidos con el célebre Kennedy-Nixon en 1960. Quiénes lo vieron por televisión dieron ganador a Kennedy y quiénes lo escucharon en radio a Nixon. Finalmente fue para el primero la presidencia. En el reciente proceso electoral estadounidense hay quienes dieron por ganadora de los debates a Hillary Clinton pero le faltó para noquear a Donald Trump. El último de los esperados debates tuvo lugar en Francia. Emmanuel Macron dio la estocada final a la ultraderechista Marine Le Pen y le ganó por amplio margen.
A final de cuentas se viven tiempos de electores muy cambiantes. En esta ocasión los candidatos presidenciales tendrán tres oportunidades para demostrar de qué están hechos y cuáles son sus deficiencias. ¿Serán suficientes para influir en el resultado final de la elección? En principio los cambios propuestos para el próximo debate prometen frescura y posibilidades de cuestionar a los candidatos, interrumpir si así lo juzgan. Y eso, ¡ya será ganancia!
