Aprobada en los días previos al confinamiento legislativo, la reforma que define, previene y castiga la violencia política de género se ha sometido a la prueba de la realidad, con el caso de Jaquelina Escamilla Villanueva, directora del Instituto Municipal de las Mujeres en Oaxaca (IMMO), quien arbitrariamente fue destituida por las autoridades locales porque no acató sus órdenes, mismas que eran contrarias a la ley y al mandato de las consejeras del IMMO.
La titular de este órgano desconcentrado fue presionada por el presidente municipal Oswaldo García (Morena) para que la institución a su cargo promoviera y organizara un evento en contra del aborto, hecho que en la legislación estatal ya se encuentra despenalizado.
Ante la negativa de Jaquelina Escamilla Villanueva a realizar un acto a modo, ajeno a los mandatos del IMMO, las autoridades municipales la desconocieron.
La historia cae como anillo al dedo, diría el clásico, porque obliga a diputadas, senadoras, funcionarias, magistradas y feministas de la República a calar el nuevo marco jurídico y demostrar su viabilidad como instrumento que permitirá a las instituciones correspondientes garantizar la justicia y la reparación del daño.
Las denuncias están presentadas y pronto sabremos si la reforma que en el papel aplaudimos también tiene, en los hechos, los filos suficientes para ponerle un hasta aquí a las bravuconadas machistas que son cosa de todos los días.
Por lo pronto, Jaquelina Escamilla alzó la voz y encontró eco en el Instituto Nacional de las Mujeres que encabeza Nadine Gasman y en las integrantes del Grupo Plural de Igualdad Sustantiva de la Cámara de Diputados, quienes a través de una conferencia Zoom le manifestaron este jueves 11 de junio su respaldo y le ofrecieron su acompañamiento en la batalla emprendida.
Comparto aquí parte del testimonio ofrecido por la presidenta del Instituto Municipal de las Mujeres de Oaxaca y algunas reflexiones de las legisladoras que han decidido desplegar sus esfuerzos institucionales para que la nueva ley contra la violencia política de género se cumpla.
JAQUELINA ESCAMILLA VILLANUEVA:
“Hace varias semanas iniciamos con una serie de conferencias sobre los derechos de las mujeres en la pandemia.
Y, en esta ocasión, habíamos decidido hablar sobre las mujeres y el derecho a decidir las maternidades libres y seguras (…) Cuando termina esta conferencia, inmediatamente la esposa del presidente (municipal) me marca para pedirme una explicación y pedía, de inmediato, que se abriera el espacio para que grupos que estaban en contra pudieran hablar y me dice que era una instrucción.
“Por lo delicado del tema, porque nunca fue mi intención generar debate, ya que estábamos hablando sobre los derechos de las mujeres, de lo que ya está legislado, lo que ya se discutió en Oaxaca, hace un año, le pregunté por escrito al presidente municipal si realmente era una instrucción de él y le dí algunas posibilidades de abrir otros canales de comunicación que fueran más acordes con lo que estas personas planteaban para que el Instituto siguiera en su dinámica solamente de promover los derechos de las mujeres.
“No tuve contestación, hasta que, el día martes, el jefe de la oficina me instruye que suba a las plataformas del instituto el cartel de la próxima conferencia que sería al otro día, el miércoles, sobre el derecho a la vida. (…) Las consejeras ciudadanas del Instituto se pronunciaron afirmando que no era el espacio adecuado para esa conferencia, porque no había nada qué debatir en el tema, que había sido ya legislado en la Cámara de Diputados local.
“El presidente municipal me dijo que era una instrucción y ‘tú la tienes que hacer; yo estoy muy pendiente de lo que tú estás haciendo, por favor, te pido mente abierta, por favor, te pido que seas imparcial’. Hubo problemas técnicos para realizar la conferencia. Reporté a la Comunicación del ayuntamiento lo que sucedía y estábamos buscado una alternativa, cuando me llama el presidente municipal, me acusa de que yo estaba boicoteando su conferencia, desacatando su orden (…) Me dice que en ese momento me exigía mi renuncia en su escritorio y yo le dije que yo no le iba a presentar ninguna renuncia, porque no estaba, primero, ni desacatando su instrucción, que no me podía obligar a lo imposible, que yo no era el técnico en ese momento. Y me dijo que si yo no quería renunciar, que en ese momento con el poder que la ley le confería me destituía del cargo. Acto seguido, expresé en redes sociales haber sido agredida en mis derechos laborales y no he vuelto a tener ninguna comunicación con él.
“Al siguiente día, en una estación de radio, declara que él me ha destituido por insubordinación, por boicotear una conferencia de él, por ser parcial. Y así lo ratifica posteriormente en el boletín de prensa que emite comunicación social del gobierno municipal.
“Inmediatamente acudí a la Defensoría de los Derechos Humanos de los Pueblos de Oaxaca, porque desde el viernes y hasta ese día de la conferencia, por todas las presiones y amenazas veladas que estuve viviendo, temía por mi seguridad (…) Acudí a la Fiscalía de Género a presentar mi denuncia”.
DIPUTADA GUADALUPE ALMAGUER PARDO (PRD): “Este es un caso que tendrían que resolver los tribunales. Afortunadamente ya tenemos ley contra la violencia política hacia las mujeres, y este será la punta, el ejemplo, de que la ley que se acaba de publicar en el Diario Oficial de la Federación será efectiva (…) Y hay que recomendarle al presidente municipal, Oswaldo García, que le eche una leída a la ley contra la violencia política hacia las mujeres para que conozca el impacto a lo que se somete quien violenta sus derechos políticos”.
DIPUTADA VERÓNICA JUÁREZ PIÑA (PRD): “Ya se han presentado algunas denuncias por violencia política y abuso de autoridad ante el Instituto Electoral, ante la Fiscalía, ante la Defensoría de Derechos Humanos, y en este sentido, pedimos al presidente municipal, que tiene una responsabilidad enorme, y al señor gobernador del estado que actúen en este caso”.
DIPUTADA MARTA DEKKER GÓMEZ (PT): “Este caso visibiliza la situación que vivimos las mujeres cuando estamos inmersas como funcionarias públicas en otras áreas, cuando nos han impedido desarrollar nuestras actividades de manera libre, con la conciencia y la responsabilidad que tenemos. Porque independientemente del tema que se estaba abordando, hay una clara violación a tus derechos políticos, y por supuesto, ahora también una violación a tus derechos laborales por un despido injustificado”.
DIPUTADA SILVIA LORENA VILLAVICENCIO AYALA (MORENA): “Lo importante de la nueva ley de violencia política, además de que sanciona al agresor, es que no solamente protege a las mujeres que quieren participar en la vida pública, sino también protege a las mujeres que ya están en la vida pública, que tienen responsabilidades como funcionarias. (…) Tenemos dos estados que ya avanzaron en el reconocimiento de las mujeres a decidir sobre su propio cuerpo, que es despenalizando la interrupción del embarazo, como es Oaxaca y la Ciudad de México, y esa, evidentemente, es de cumplimiento obligatorio. Se puede estar a favor o en contra, pero las leyes se cumplen, y eso lo tiene que saber claramente el presidente municipal”.
DIPUTADA ALEIDA ALAVEZ RUIZ (MORENA): “No es posible que en Oaxaca, siendo un estado en el que avanzamos, afortunadamente, con la despenalización del aborto, ahora resulta que, por medidas políticas o decisiones políticas, se van a imponer qué tipo de mensajes, qué tipo de información se le da la gente. Ya está en la ley y la ley es para cumplirse, no estamos reformando leyes para que no las tomen en cuenta. Esto nos causa profunda indignación y vamos a respaldarte en todas las acciones que tengas que realizar“.
DIPUTADA MARTHA TAGLE MARTÍNEZ (MOVIMIENTO CIUDADANO): “En temas de violencia política nos van a encontrar unidas, siempre, a las mujeres de todos los partidos, alzando la voz, porque nos parece muy importante que el paquete de leyes que se ha aprobado recientemente, y que estamos pugnando por que se armonice en todos los estados, sean realmente leyes que nos garanticen a las mujeres poder formar parte de las decisiones públicas, en igualdad de condiciones, y sobre todo, libre de violencia (…)Desafortunadamente, tenemos muchas historias y casos de mujeres que siendo alcaldesas, regidoras, síndicas, han sufrido violencia, y es importante empezar a dejar precedente para que ningún caso quede impune”.
