En el marco del Día Mundial de la Diabetes, celebrado el 14 de noviembre, acudí esta semana a un evento culinario organizado por la Asociación de Productores de Avena Canadiense (POGA), la Embajada de Canadá y la Federación Mexicana de Diabetes.
El objetivo fue mostrar los beneficios y la versatilidad de la avena como un alimento coadyuvante en la dieta recomendada a las personas que viven con esa enfermedad, aunque no exclusivamente para ellos, sino también para mostrar un cereal que puede ser incluido en el menú familiar.
Una premisa del Día Mundial de la Diabetes es ofrecer alternativas de alimentación correcta con la preparación de platos saludables. Por esa razón, en el evento también se presentaron y degustaron las 10 recetas finalistas del cuarto “Concurso de recetas con avena“, explicadas por sus autoras y compiladas en este recetario. https://avenacanada.com/images/pdf/cookbook-avenacanadiense.pdf
Normalmente pensamos en la avena como un insumo para veganos o personas a régimen, y creo que es así porque esa es la imagen que la publicidad nos ha vendido. Y a pesar de que desde hace años es un cereal de fácil acceso en supermercados y tiendas naturistas, aún desconocemos sus múltiples usos, más allá de incluirlo en el tazón del desayuno con frutas.
Incluso para mí, conocer de qué otras formas podemos usarlo dentro de la dieta familiar fue una grata sorpresa y un aprendizaje tan útil que –ni tarda ni perezosa– puse ya manos a la obra preparando mi pan de plátano con 80 por ciento de harina de avena.
Y es que, una gracia de este cereal es que no contiene gluten, por lo tanto, es de índice hipoglucémico bajo, pero sí “representa una fuente de carbohidratos, aminoácidos, vitaminas, minerales, fibras y proteínas”.
De acuerdo con lo expuesto en el evento por el representante de POGA, el consumo de avena, entre otros beneficios, “mejora la digestión, ayuda a reducir la tensión y a desintoxicar la sangre, ayuda a reducir el riesgo de ataques cardiacos y contiene fibra que atrapa y elimina el colesterol malo del cuerpo”.
Puede ser horneada o cocida junto a infinidad de ingredientes, tal como lo mostraron las finalistas del concurso, preparando, entre otros platos, unos “Ravioles rústicos de avena, hongos y flor de calabaza”, la “Paella-avena Hawaiana nutritiva”, los “Lingotes de avena rellenos de espinacas”,el “Taco árabe con avena y frijol negro” y la “Tartaleta de crema pastelera de avena y costra de avena con almendras”.
La paella hawaiana y la barra energética salada, a partir de harina de avena pulverizada con romero y rellena de espinacas y albahaca, fueron mis platos salados favoritos.
De la oferta dulce, el “Dúo de frijol negro con top de coco” es un acierto que suma sabor, textura y nutrición, un trío difícil de conseguir.
Vayan al recetario para experimentar en casa cualquiera de las 10 deliciosas opciones.
Además de ser “un aliado formidable para la gente con diabetes, porque ayuda a mejorar el control de azúcar de la sangre”, la avena también “contiene vitamina B1, que fortalece el sistema nervioso, es antioxidante, tiene propiedades humectantes para la piel y puede ayudar a controlar el peso”.
Una taza de avena contiene sólo 150 calorías. Claro que nos referimos a las hojuelas naturales sin azúcar adicional, como las que suelen incluir en las granolas comerciales.
Como a mí sí me importa saber de dónde vienen los alimentos que consumo, es bueno saber que Canadá es el principal productor y proveedor de avena para México y el mundo, cuyos granos “cumplen con las más estrictas medidas sobre la salud y el ambiente”
Creo que la avena es una forma deliciosa de empezar o terminar el día. Es cosa de experimentar y probar.
Para más información sobre avena, da clic aquí: https://avenacanada.com/sobre-la-avena.