Por SARAÍ AGUILAR
En medio del ambiente festivo del Mundial Rusia 2018, surgió la campaña titulada “El No Tan Hermoso Juego”, en la que se mostraban banderas convertidas en heridas y cicatrices. Las imágenes están acompañadas de frases como “Si Inglaterra es derrotada, también lo será ella”.
Esto, debido a que estudios de la Universidad de Lancaster realizados en 2002, 2006 y 2010 indicaron que la violencia doméstica aumentó 38 por ciento cuando Inglaterra perdía un partido y 26 por ciento cuando ganaba o empataba. No todos los casos de violencia son denunciados.
Estas cifras encendieron alertas en el Centro Nacional de Violencia Doméstica en Gran Bretaña, lanzando una fuerte campaña para prevenir la violencia contra las mujeres propiciada por los marcadores futbolísticos. Esta iniciativa, llevada a cabo por la agencia londinense J. Walter Thompson y encargada por el gobierno inglés, ha aparecido en periódicos, carteles gigantes y redes sociales.
Debido a que el problema no se limita a Inglaterra, se incluyeron imágenes referentes a las banderas de otros países como Francia o Bélgica, para hacer conciencia de un problema global.
En nuestro país, en el ya lejano 2010, la Federación Mexicana de Futbol apoyó la campaña contra la violencia doméstica que promovió la Fundación Origen. Por ello, en los encuentros de las jornadas 16 y 17 del Torneo de Apertura 2010, los equipos expusieron el mensaje: ¡Ni Una Más!
¿Acaso el futbol es la causa real?
En un análisis llevado a cabo en 2013 por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en colaboración con la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres y el Consejo de Investigación Médica de Sudáfrica, en el que se utilizaron los datos de más de 80 países, se observó que, en todo el mundo, una de cada tres mujeres (o el 35 por ciento) había sido objeto de violencia física o violencia sexual bien dentro o fuera de la pareja.
La triste realidad que enfrentan las mujeres es que el Mundial acabó el domingo y muchas seguirán siendo violentadas. La situación de vulnerabilidad en la que se encuentran las hace más propensas a ser víctimas. La conclusión del torneo deportivo no desaparecerá las circunstancias personales, sociales y culturales que facilitan los actos de violencia en contra de las mujeres.
En México, de acuerdo con un informe presentado por la Red Todos los Derechos para Todos (Red TDT), que aglutina a 87 organizaciones civiles, hay un promedio de 7.5 mujeres asesinadas cada día, 15 mil 466 desaparecidas, más de 50 mil víctimas de trata, 36.5 violaciones diarias, códigos penales que criminalizan el aborto y 20 millones de mujeres que refieren haber sufrido algún tipo de violencia sexual.
Es de festejarse que Inglaterra detecte detonantes de la violencia contra la mujer. En México, aunque su selección haya sido eliminada hace ya semanas,lamentablemente la violencia no cede. Seguimos sin árbitro ni alguna otra autoridad que nos prevenga contra el juego sucio.
En el fondo del arcón
La FIFA ha decidido tomar medidas contra aquellas imágenes en las que se muestren mujeres atractivas como una forma de luchar contra el sexismo. Una medida que se concreta en la orden directa a los canales encargados de las retransmisiones de dejar de concentrarse en aficionadas guapas que en el Mundial de Rusia han llenado las pantallas.
“Lo hemos hecho con emisoras individuales y con nuestros servicios de transmisión anfitriones”, dijo el jefe de diversidad de FIFA, Federico Addiechi, y añadió que la federación todavía no estaba siendo “proactiva” con respecto a esta política, pero que “tomaría medidas contra las cosas que se hagan mal”.
No es un asunto sobre el que sea fácil adoptar una postura. No es desdeñable que desde la máxima autoridad futbolística se propongan acciones contra el sexismo, pero es cierto que en esta polémica también se entreveran cuestiones sobre cánones de belleza y libertad de expresión e información. El tema da para reflexionar y opinar.