Sus detractores lo comparan con Trump; sus seguidores con Bernie Sanders. Tratar de decidir a cuál de los dos se parece (si es que a alguno) resulta muy difícil desde la distancia. Siguiendo a los medios mexicanos, AMLO solo es o un prócer de la patria o un déspota en ciernes: no hay medias tintas. Por eso la conferencia de prensa que dio la semana pasada en la capital estadounidense, brindaba una buena oportunidad de tratar de cotejar las dos versiones. De sobra está decir que en el espacio de poco más de una hora, no se define nada. Aun así, escucharlo “de viva voz” nos permitió ver ciertos rasgos de su persona que serían difíciles de vislumbrarse de otra manera.
La conferencia de prensa en el National Press Club (NPC), se dio, según su presidente, Jeff Ballou, a instancias de John Ackerman, quien mandó una petición que luego fue aprobada por un comité. El salón Lisagor Room (capacidad máxima 50 personas), estaba casi lleno. Además de Ackerman, que venía como asesor jurídico internacional y traductor, acompañaba a López Obrador Netzaí Sandoval, abogado encargado de la denuncia ante la Comisión Inter-Americana de Derechos Humanos (IAHRC) en contra de las deportaciones arbitrarias ordenadas por el presidente Donald Trump.
Con algunos minutos de retraso, AMLO llegó impecablemente vestido. Su modo y hablar pausado contribuye a una apariencia afable. Si se destacan más sus afinidades con el presidente de Estados Unidos, también hay que decir que AMLO da la impresión de ser, por lo menos, bien intencionado —aunque a veces sus palabras lo traicionen–. Me quedo con la sorprendente frase que dijo al despedirse: “Muchas gracias y si contesté de manera ruda, ofrezco comprensión”.
Armando Guzmán [TV Azteca]: El gobierno anterior deportó a muchísima gente, a casi un millón. ¿Dónde estaba usted? ¿Por qué no dijo nada? ¿Por qué viene hasta ahora?
AMLO: Es falta de información de tu parte. Lo denuncié en su momento.
Guzmán: ¿Ante quién?
AMLO: Ante la opinión pública hicimos notar que durante el gobierno del presidente Obama, se deportaron en promedio 250 mil mexicanos por año. Lo denunciamos y hay constancia pública. Ahora estamos procediendo legalmente ante la ausencia por completo del gobierno mexicano. Peña está actuando de manera sumisa y sin hacer valer los derechos humanos de los migrantes. Lo que debió hacer de inmediato como Presidente de la República ante la estrategia en contra de los mexicanos y migrantes fue presentar la denuncia en la ONU, no lo descartamos todavía. Vamos a seguir exigiendo que actúe. Nosotros no podemos hacer una denuncia directa en la ONU, corresponde a los gobiernos de los estados seguir ese procedimiento, si lo podemos hacer en la Comisión Interamericana.
Guzmán: Pero ayer estuvo en New York también ¿No fue para eso precisamente? Lo que pasa es que en Nueva York la ONU estaba cerrada.
AMLO: Sí, tenía una entrevista con el Secretario General Adjunto para Derechos Humanos, pero se canceló por la tormenta de nieve. Sin embargo, se le va a entregar el día de hoy una carta protesta.
Moderador [Jeff Ballou]: ¿Qué pasa si el Presidente de los Estados Unidos clasifica sus acciones solemnemente en nombre de la seguridad nacional?
AMLO: Yo creo que más allá de las fronteras, o sin importar fronteras, debe de procurarse el respeto a los derechos humanos. Es una falacia, un disparate, decir: Estados Unidos Primero o América primero; lo primero es la justicia y la fraternidad universal.
Reportera: Usted habla de derechos humanos, recuerda el caso Ayotzinapa, sabe usted que el Señor Antonio Tizapa lo atacó a usted; usted lo llamó provocador, ¿hay alguna opción de retractarse de lo que dijo?
AMLO: Sí, fue muy lamentable lo sucedido en Nueva York porque tuvimos que interrumpir nuestra asamblea por un acto de provocación; lamentable porque nosotros estamos luchando en contra del régimen opresor de México que causó la desaparición de los jóvenes de Ayotzinapa, y a nosotros que enfrentamos al régimen en contra de esa barbaridad, se nos reprocha. Estoy convencido que fue un acto de provocación. Entiendo la desesperación que pueda tener el padre de este joven, lo comprendo, pero no estoy de acuerdo con ese procedimiento, porque es injusto. Se lo dije en el momento, el reclamo es al estado, no a nosotros; el reclamo es al régimen, el reclamo tiene que ser a Peña, a las fuerzas armadas, a quienes intervinieron en ese crimen, no a nosotros. Es una gravísima confusión, lamentable. Desde luego, en el marco de nuestra lucha por la libertad, por la justicia, por la verdadera democracia, estamos enfrentando a una mafia de poder.
Dolia Estévez: ¿Qué nos puede decir sobre la llamada telefónica entre Peña Nieto y Trump a finales de enero en la que éste amenazó con enviar tropas a México para combatir a los cárteles?
AMLO: Lamento que el presidente Peña, se haya dejado sobajar por el presidente Donald Trump en la llamada telefónica a la que haces referencia, y creo que debería conocerse la conversación, es un asunto fundamental para la vida pública (inclusive de los dos países, no solo de México). Lo que se reconoció sobre la llamada es vergonzoso. El acuerdo al que se comprometía el presidente Peña de no hablar sobre la construcción del muro, eso es abdicar, es no asumir la responsabilidad que se le confiere a un mandatario de un país libre y soberano.
Sigue AMLO: Nosotros no queremos una relación de subordinación ni lo vamos a aceptar; México es un país independiente, libre, no es una colonia, ni tampoco un protectorado. No vamos nosotros nunca jamás a subordinarnos a ningún gobierno extranjero. Sin faltar el respeto a nadie, pero con firmeza tenemos que hacer valer nuestros derechos, y en el caso de la relación con Estados Unidos que es fundamental para México, por cuestiones de historia, de cultura, de vecindad, más de tres mil kilómetros de frontera compartimos, por cuestiones económicas, comerciales, tenemos que buscar una relación respetuosa, de amistad, pero no fincada en el uso de la fuerza, sino en la cooperación para el desarrollo. Los problemas de inmigración, de seguridad y de violencia no se resuelven con muros ni con medidas restrictivas; la paz y la tranquilidad son frutos de la justicia. En su momento, vamos a convencer al gobierno de los Estados Unidos y al Presidente Donald Trump de que lo mejor es un buen acuerdo de entendimientos, sobre la base de la cooperación para el desarrollo. En lo que corresponde al TLCAN, pienso que no nos va a alcanzar el tiempo, que no se va a llevar a cabo ninguna revisión comercial antes de las elecciones en México, porque tanto en Washington como en México “en palacio las cosas caminan despacio”.
Mauricio Olguín: Usted dijo hace un momento que no está de acuerdo con la manera que le hicieron la pregunta en Nueva York, pero no contestó: ¿Qué hizo con Aguirre y Abarca cuando usted era uno de los líderes del PRD? La segunda pregunta sería: Después de ver la manera en que Trump trata a la prensa ¿Eso es lo que podemos esperar de usted? ¿Contestará preguntas incómodas o va a catalogar a la prensa como provocadores?
AMLO: No, tan es así que usted está libremente hablando. Yo le respeto mucho y le contesto que no tengo nada que ver con el señor Abarca, ni con el señor Aguirre. Yo tengo autoridad moral, tengo autoridad política. Si no fuese consecuente, ya me hubiesen destruido. No tengo nada de qué avergonzarme, asimismo se lo puedo contestar: no tengo nada absolutamente que ver en ese lamentable caso. Desde hace años padecemos de guerra sucia, pero tenemos un escudo protector, que es nuestra autoridad moral.
Moderador [Jeff Ballou]: Me voy a conceder la ultima pregunta: ¿Cuál sería su estrategia contra el narcotráfico?
AMLO: Bueno, yo tengo que terminar esta conferencia, este diálogo circular, porque tengo que irme. No uso avión privado; no soy Peña. Para contestarle, pienso que debe cambiarse por completo la actual política de seguridad o la estrategia que han aplicado para supuestamente enfrentar el problema de la inseguridad y de la violencia en el país, porque ha resultado en un profundo fracaso. Es triste decir que a partir de que se tomó la decisión de declarar la guerra contra el narcotráfico, a partir de que Calderón le pegó una garrotazo a lo tonto, al avispero, hasta ahora 10 años, 210 mil asesinatos, más de un millón de víctimas de la violencia, y lo peor es que no quieren cambiar la estrategia fallida, siguen insistiendo en querer enfrentar la violencia con la violencia, de manera hipócrita, porque no quieren atender las causas. Nosotros vamos a afectar la política, la estrategia de seguridad, vamos a atender las causas, vamos a reactivar la economía, tiene que haber empleos. La cooperación que ha habido con Estados Unidos ha sido en ese sentido, el plan Mérida, la entrega de armamentos, helicópteros… Todavía ayer, sale en la prensa una fotografía de altos mandos de la marina con helicópteros adquiridos para masacrar. En nuestro caso, eso no lo vamos a hacer, vamos a atender las causas y pensamos que si no hay corrupción, si hay justicia, si se atiende a los jóvenes, vamos a serenar al país y repito la paz y la tranquilidad son frutos de la justicia, en ninguna parte del mundo funciona el uso de la fuerza, eso es irracional, está demostrado que lo más eficaz, lo más humano es atender las causas que provocan la inseguridad y la violencia, entonces eso es lo que vamos a llevar a cabo.