Asegura Enrique Ochoa que si Andrés Manuel López Obrador gana la presidencia el primero de julio, se registraría una devaluación del 10 por ciento. Lo que no dice el dirigente del PRI es que durante el gobierno priísta, el peso se ha devaluado más del 60 por ciento.
Igual que en 2006, al candidato de MORENA le acusan de ser “populista” –sin definir qué es ser populista- y que el país se desintegrará en cuestión de minutos (exagero, pero los detractores de AMLO también).
Pero un tema que el PRI no ha querido llevar a las precampañas, y seguramente no lo hará en campaña, es el de la seguridad.
Y es que una de las principales promesas que hizo el PRI en 2012 fue, precisamente, darle a los mexicanos tranquilidad y seguridad. No supieron cómo hacerlo.
Enrique Peña Nieto y su gabinete de seguridad fracasaron con su “estrategia de coordinación” entre las diferentes instancias de gobierno para abatir al crimen organizado.
La promesa de seguridad se vino abajo cuando los índices delictivos en 2017 se van al cielo y se registra como el año más violento de las últimas dos décadas.
Peña Nieto falló. Y el tema seguridad le va a pegar a su candidato José Antonio Meade.
¿Cómo se va a promover Meade ante los habitantes de Michoacán, Colima, Tamaulipas, Guerrero y Sinaloa? Por ejemplo, en Tamaulipas, durante el gobierno de Egidio Torre, Osorio Chong llevó (es un decir) una estrategia para contener al crimen organizado. Pero lo que no hizo, fue desmembrar la colusión entre autoridades estatales y municipales (emanadas del PRI) y el crimen organizado.
La llegada de un nuevo gobernador que no es priísta, está tratando de articular una estrategia que parte de la recuperación de espacios públicos y la recomposición del tejido social para que los tamaulipecos regresen a la “normalidad”. Peña falló ahí, Osorio no atendió a fondo y los tamaulipecos prefirieron cortar por lo sano: votaron en contra del partido que entregó la “plaza” a los delincuentes y se coludió con ellos.
Eso le puede suceder al PRI en otras localidades del país. ¿Qué le dirá a Meade a las madres y padres, hijos, hermanos, esposos, novios, amigos de las mujeres asesinadas en Ecatepec, Nezahualcóyotl o Ixtapaluca en el estado de México para obtener su voto?
La seguridad será, el tema de campaña. Más cuando a López Obrador se le “ocurrió” poner en la mesa la posibilidad de amnistiar a delincuentes y de que creará una Guardia Nacional bajo su exclusiva autoridad.
Peña y los suyos no pudieron o no quisieron y coreen el riesgo de ser derrotados por una ráfaga de votos.