Redacción / De acuerdo a las tradiciones del municipio de Metlatónoc en Guerrero, los hombres pueden pagar hasta 180 mil pesos por una adolescente para “hacerla su mujer” o para su hijo.
La región ubicada en la montaña de Guerrero, es el segundo ayuntamiento con el índice de desarrollo humano más bajo de América Latina, por debajo de los países que integran el África Subsahariana, y el quinceavo lugar entre los más pobres a nivel nacional, según datos del Coneval.
En la publicación que sacó el periódico El Universal, el Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, señaló que en los últimos 17 años, unas 300 mujeres han tenido que casarse bajo las decisiones de los hombres, en contra de su voluntad y violando su derecho a decidir si quieren o no hacer vida en pareja y con quién.
En el informe del 2017, Tlachinollan destaca que si bien la práctica es una costumbre entre los pueblos indígenas, esta ha perdido su esencia y termina en un intercambio comercial que atenta contra el cuerpo y la dignidad de las mujeres.
Además, documenta que abundan testimonios de niñas y mujeres donde narran que han sido víctimas de este tipo de arreglos económicos entre su padre y el padre de su futuro esposo. Son tratadas como objeto, como propiedad del esposo, dándole derechos sexuales sin consentimiento previo.
