Durante el podcast Amarelille, en su episodio 6: “VERDAD, VIOLENCIA Y JUSTICIA: EL CUERPO DE LAS MUJERES COMO CAMPO DE DISPUTA”, María del Socorro Pensado Casanova, abogada internacionalista y fundadora de Amarelille, expuso que “en cada caso que llega a los tribunales se juega mucho más que la suerte de una persona: se decide si la justicia será capaz de escuchar voces históricamente silenciadas y de desmontar estructuras que han normalizado la violencia y la discriminación”.
En este sentido destacó las recientes sentencias de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) “ha demostrado que juzgar con perspectiva de género no es un adorno retórico, sino una exigencia constitucional y ética que transforma el sentido mismo del derecho”.
“Hablar de estos precedentes es hablar de mujeres que han sido víctimas, pero también de mujeres acusadas penalmente; es reconocer que el género atraviesa los procesos judiciales de principio a fin y que la imparcialidad real solo es posible cuando se despoja al derecho de prejuicios y estereotipos”, señaló ante su invitada Angie Fernanda Viracachá Sandoval, especialista en Derecho Administrativo en Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario (Colombia).
Ante ello, confió en que la nueva Corte herede este legado de impartición de justicia con perspectiva de género, interseccional y con enfoque de derechos humanos.
En este marco, analizaron cuatro sentencias emitidas por el máximo tribunal, en las que se evidencia que la perspectiva de género es una herramienta metodológica que permite visibilizar las desigualdades estructurales y evitar que los estereotipos influyan en la decisión judicial.
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