Por. Adriana Luna, corresponsal
Zapopan, Jal.- Durante las fiestas decembrinas se disparan las atenciones en las instituciones que velan por la protección de las mujeres. Se reciben alrededor de 250 víctimas de violencia mensualmente.
En la supuesta época de armonía y paz, en los hogares afloran los diversos tipos de violencia. Los golpeadores y narcisistas se exhiben en Navidad y en Año Nuevo para ‘dejarle claro a la mujer’ quién es el que manda en la casa.
Ellos deciden hasta a qué fiesta sí va la mujer y a cuál no. Esa es la violencia social. “No te permite ir a tal lugar, porque seguro vas a encontrarte con alguien. Los celos. Hay que estar muy pendiente de las diversas modalidades de violencia”, apunta Socorro Madrigal Gallegos, directora del Instituto Municipal de las Mujeres Zapopanas para la Igualdad Sustantiva.
La violencia económica suele darse inmediatamente después de recibir los aguinaldos: “Se incrementa porque los caballeros toman, viene el tema del recurso económico, les dan el aguinaldo, sí se lo gastan a pesar de las necesidades que tenga la familia, la mujer. El tema de las fiestas es uno de violencia”, añadió.
Los protocolos para erradicación de violencia actúan con rapidez para proteger a la mujer y a los hijos menores de edad, se emite de inmediato por un lapso de 72 horas para permitir a la víctima ir a las autoridades para presentar denuncias.
“Un morete, un jaloneo puede generar un esguince cervical que no se ve pero que sí existe. Puede haber mujeres muy golpeadas, maltratadas, hay que seguir un protocolo. Hay que presentar la denuncia. Si estás golpeada hay que ir por un parte médico y al Centro de Justicia a levantar la denuncia correspondiente para lo que sigue: una orden de restricción, de alejamiento o un pulso de vida”.
Las víctimas no son solo mujeres de escaso nivel educativo o económico, también suelen ser “profesionistas y mujeres que son esposas de altos mandos, la violencia existe en cualquier ámbito. Violencia física, emocional, económica y social”.