La obesidad es el principal problema de salud en el país, ya que provoca muertes prematuras y es el principal factor de riesgo para desarrollar enfermedades que son las causas de muerte y pérdida de años de vida saludable y productiva, señaló el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Ruy López Ridaura.
Al participar en la conmemoración del Día Mundial de la Obesidad, y el lanzamiento del Día Nacional de la Obesidad en el Senado de la República, mencionó que las personas que viven con cáncer, obesidad y problemas cardiovasculares pueden vivir cinco, 10 y hasta 15 años con mala calidad de vida y el impacto negativo en la familia, por lo que la efeméride es una oportunidad para invitar a la población a tomar medidas preventivas.
Explicó que la obesidad es un problema que está prácticamente en todos lados, incluso en comunidades rurales, donde ya se observa el ascenso en la prevalencia de esta enfermedad, debido a que existen ambientes parecidos a los urbanos, contaminados con publicidad y fácil acceso a productos ultraprocesados, y con poco consumo de alimentos naturales; estos entornos se denominan “ambientes obesogénicos”.
Un factor que influye en la obesidad, precisó, son las dietas de mala calidad y la promoción del consumo de ultraprocesados y bebidas azucaradas, impulsado por la industria alimentaria, y otras asociadas al sistema agroalimentario, como la de agroquímicos, que es altamente poderosa e impulsa la agricultura industrial con nula conservación del medio ambiente.
En tanto, el director del Centro de Investigación en Nutrición y Salud del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), Simón Barquera Cervera, informó que en la actualidad la incidencia de la obesidad es el doble en comparación con los años 80, y su aumento pone en riesgo el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Organización de las Naciones Unidas para 2030.
Advirtió que la población percibe a la obesidad como factor de riesgo, pero no la identifica como una enfermedad; aun cuando está reconocida en la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE). En el mundo, para el año 2035 habrá cuatro mil millones de personas con este problema si no se hace aborda con seriedad, y en la población infantil podría duplicarse.
En México, 36.9 por ciento de personas adultas vive con esa condición, y en 2030 podría llegar a 45 por ciento. En este contexto, el Día Nacional y Mundial de la Obesidad, que se conmemora el 4 de marzo, es una oportunidad para aumentar la concientización sobre el problema, fomentar la abogacía y compartir experiencias.
Al respecto, el investigador del INSP, Juan Rivera Dommarco, mencionó que todos somos rehenes de un sistema alimentario que no es saludable, ni sostenible ni justo, y de no actuar estaríamos condenando a las infancias a un futuro no saludable y un planeta encarecido.
La investigadora del Centro de Investigación en Salud Poblacional del INSP, Ana Basto Abreu, dijo que tener obesidad aumenta el riesgo de complicaciones graves y fallecimiento por enfermedades infecciosas como COVID-19.
Sostuvo que el estado de salud de la población, como la prevalencia de enfermedades no transmisibles, es un factor crítico que debe considerarse parte de cualquier esfuerzo integral de preparación para pandemias.