De acuerdo con datos de la Secretaría General del Consejo Nacional de Población (Conapo), en 2022 nacieron 9 mil 185 bebés cuyas madres son menores de 15 años de edad, en México.
Cabe precisar que de esta cifra, el 98 por ciento son niñas de 13 y 14 años, En tanto, los estados donde se presentan con mayor frecuencia estos embarazos son las zonas marginadas de Guerrero, Chiapas, Coahuila y Veracruz, informó la Conapo en un comunicado.
Paralelamente, una gran mayoría de nacimientos de padres adolescentes ocurren entre los 15 y 19 años de edad (más de mil cada día en México).
Para concientizar y dimensionar la problemática, y dejar claro que los matrimonios y uniones infantiles interrumpen la vida de niñas y adolescentes, además de que limitan su capital cultural, la Subsecretaría de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación a través de la secretaria general del Conapo, Gabriela Rodríguez Ramírez, encabezaron la presentación de la publicación Niñez interrumpida. Matrimonio infantil y adolescente en México.
Asimismo, con dicha publicación disponible en el sitio www.gob.mx/conapo se busca coadyuvar hacia un cambio cultural que termine con estas prácticas que violentan los derechos de niñas y adolescentes, además de contribuir a la igualdad e inclusión social de este grupo poblacional y su continuidad educativa.
Los matrimonios y las uniones infantiles tempranas y forzadas son causa y consecuencia de una limitada autonomía física, económica y la toma de decisiones sobre las mujeres, sobre todo, niñas y adolescentes que viven en zonas rurales y en hogares en situación de pobreza y marginación.
En 2020, en el mundo se registraron 225 mil matrimonios de adolescentes entre 12 y 17 años de edad o en unión libre, lo que representa una violación a sus derechos humanos básicos, ya que las niñas tienen mayor probabilidad de abandonar la escuela y su hogar.