Por. Fernando Coca
Estamos por cumplir la primera semana de precampaña para la renovación del Poder Ejecutivo del Estado de México y las candidatas Delfina Gómez (MORENA, PT, Verde) y Alejandra del Moral (PRI, PAN, PRD, Nueva Alianza) iniciaron sus recorridos por los principales municipios de la entidad.
El PRI ha comenzado a reclutar a militantes que tenía segregados desde hace varios lustros para acompañar a la candidata de Alfredo del Mazo, pues ella misma no cuenta con la actitud que la acerque a los electores y necesita de políticos locales que toquen la puerta por ella, hablen por ella y se comprometan por ella, aunque ella, no vaya a cumplir en el caso, hoy parece remoto, que gane la elección.
Delfina Gómez regresa a los recorridos después de seis años. Ahora tiene más experiencia, pero su equipo sigue siendo el mismo. Horacio Duarte ahora es el coordinador general de la campaña (en 2017 era el presidente de MORENA), Higinio Martínez tiene un cargo de delegado del CEN del partido y los presidentes municipales de las principales localidades son militantes del GAP y están en MORENA.
Si las encuestas se hicieran realidad, hoy la victoria, abrumadora, la tendría Delfina Gómez. Los priistas dicen que se mantendrán en el poder y cumpliría 100 años sin una alternancia política y MORENA quiere atrapar el estado con el mayor padrón electoral del país.
Creo que las propuestas de ambas candidatas no serán las que requiere la ciudadanía, es decir, la seguridad pública; la generación de empleos; medios de transporte seguros, limpios, cómodos y rápidos; agua potable; educación; salud y otros tantos servicios que tienen grandes y graves rezagos.
La contienda mexiquense se va a quedar en la polarización. Unos serán los corruptos y otros los liberadores; unos irán por el cambio y otros afirmarán que ese cambio es retroceso. La polarización será la tónica de esta elección, no las propuestas, no los proyectos, no el desarrollo, no la política.
Alguien sabe, por la trayectoria de las candidatas, ¿cuál es su postura en los temas de género, más allá de que son ellas las candidatas?
Hasta hoy Delfina y Alejandra, así pedirán que les llamen, van solas en la elección. Juan Zepeda, el senador de Movimiento Ciudadano, parece que otra vez será un candidato testimonial al que hoy no le quitará votos a la maestra de Texcoco, sino a la oriunda de Cuautitlán Izcalli. No veo cómo vaya a crecer para competir en serio.
Serán seis meses de una violencia verbal que, espero, no llegue a la física. Será medio año de zozobra por la entidad más rica en votos y que podría enterrar al partido que lleva gobernando el Edomex desde hace 94 años.
La Letrina. Del diccionario.
Sabotaje: El daño o destrucción que se hace intencionalmente en un servicio, una instalación, un proceso, etcétera, como proceso de lucha o protesta contra un organismo que los dirige o bien como método para beneficiar a una persona o grupo que es contrario a dicho organismo. Eso es lo que NO sucede en el Metro de la Ciudad de México.
Mantenimiento: Conservación de una cosa en buen estado o en una situación determinada para evitar su degradación. Esto TAMPOCO ha sucedido en el Metro en los últimos 10 años.