Por. Saraí Aguilar
Cuando uno cree que las mujeres ocupamos cada vez más espacios, viene la sociedad a recordarnos que siempre hay hombres para ocupar nuestros sitios.
Tal parece que eso está sucediendo en Televisa Noticias. Si bien la comunicadora Denise Maerker sube de nivel y se convierte en productora ejecutiva, su espacio en el noticiero de la noche y el matutino de Paola Rojas serán ocupados por hombres a partir del siguiente año.
En el reacomodo, el espacio de Maerker será ocupado por Enrique Acevedo, excorresponsal del espacio 60 Minutes. El lugar al frente del noticiero matutino de Paola Rojas lo ocupará el politólogo y periodista Genaro Lozano, el lugar que ocupaba éste será dirigido por otro hombre, José Luis Arévalo, quien conducirá H21 de Foro TV. Si bien Paola Rojas será trasladada a un espacio digital en N+ Media, su posición y la de Maerker no serán tan visibles como antes y en esta ecuación salieron dos mujeres y se quedaron tres hombres frente a cámara.
Si bien en ciertos estratos se tiende a creer que la televisión ha perdido trascendencia, y si es parcialmente cierto que el avance del internet ha desplazado a la televisión, se olvida la brecha digital existente aún.
Según estudios, al menos un tercio del país consume un promedio de cinco horas de televisión abierta. De acuerdo con Amneris Chaparro, del Centro de Investigaciones y Estudios de Género de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), “la televisión es un reflejo de la sociedad en la que vivimos y un aparato ideológico que construye realidades, idealizaciones y que contribuye a crear ideas de lo que está bien y lo que está mal”.
Si en un lugar se reproducen y perpetúan las violencias de género y se revictimiza es desde los noticieros.
En las noticias sobre feminicidios, en los manejos de las imágenes de las víctimas, en el tratamiento de la información. Si bien se ha avanzado en ello, aun sigue siendo palpable esta situación. Y aquí la forma si es fondo.
Pues no es poco relevante que a partir de 2023 los rostros de los noticieros “prime time” sean solo de hombres.
En un país donde a las mujeres en los consultorios médicos, juzgados y oficinas se les dice “señoritas” y no se les llama por su título profesional, la visibilización es y seguirá siendo necesaria.
La decisión de la principal televisora del país –en conjunto con la estadunidense Univision– no contribuye a eliminar los principales estereotipos asociados con las mujeres en el ámbito de las noticias. Como aquel en el que el estado del tiempo es presentado por mujeres vestidas con ropa que subraya su físico, mientras que se delega a hombres informar cuando hay alertas climatológicas. O que las mujeres sean relegadas a espacios como espectáculos, en los que a la información se le da tratamiento de chisme trivial.
No es casualidad que en el principal programa de análisis político de la misma Televisa, Tercer Grado, la gran mayoría de los panelistas sean varones y la única mujer sea la propia Maerker.
¿Acaso las mujeres solo estamos para protagonistas de novelas románticas?
Una pregunta que no es para nada rosa.