Por. Fernando Coca
Luego de que MORENA decidió que Delfina Gómez sea su candidata al gobierno del Estado de México, el resto de los partidos comenzaron a perfilar a sus candidatos.
Pero aún no definen con quién encabezarán el TUCOD, Todos Unidos Contra Delfina.
El PAN lleva a Enrique Vargas del Villar, exalcalde de Huixquilucan y diputado local.
Movimiento Ciudadano propone al expresidente municipal de Nezahualcóyotl, Juan Zepeda, que está tan desdibujado que podría tener una candidatura testimonial, no definitiva como lo fue la de 2017 en la que contribuyó al triunfo de Alfredo del Mazo.
En el PRI no hay definición para postular a Ana Lilia Herrera, exalcaldesa de Metepec y diputada federal (quizá la única con trabajo permanente en territorio que sí podría dar la batalla a la candidata del presidente López Obrador) o a Alejandra del Moral, de quien se considera que sería la mejor candidata para el triunfo de Gómez Álvarez.
Los perfiles de la oposición, incluido Zepeda, tendrían que medirse entre ellos para encontrar al menos débil y enfrentar a la maestra Delfina.
A pesar de los golpes mediáticos en contra de la secretaria de Educación Pública por el tema del diezmo en Texcoco, el tema no le pega a ella, pues, aunque hay una determinación del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, al parecer a los mexiquenses el asunto no les interesa.
La pregunta que se hacen los analistas de la vida pública del Estado de México no es contra quién competirá Delfina, sino cómo y con quién va a gobernar. La oposición está desarticulada y no tienen un programa que ofrecer y tampoco una o un candidato que provoque emoción.
Lo único que pone en duda el triunfo de Delfina Gómez Álvarez es cómo quedará el Consejo Estatal y el Comité Directivo Estatal de MORENA que, si mantiene la hegemonía de Higinio Martínez, podría provocarle la derrota a la maestra de Texcoco, tal y como lo hizo el “doctor” con su alianza a favor de Alfredo del Mazo y en contra de AMLO y Delfina.
La Letrina. La defensa de las víctimas del desplome de la Línea 12 del Metro denunciaron a siete ministerios públicos por manipular evidencias con la intención de que Florencia Serranía no fuera investigada y así garantizar su impunidad.
Florencia Serranía era directora del Metro y se autonombró como gerente de Mantenimiento del Sistema de Transporte Colectivo cuando la noche del lunes 3 de mayo de 2021 se derrumbó la trabe de la inter-estación Los Olivos-Tezonco lo que provocó que 26 personas perdieran la vida.
La impunidad que goza Serranía es lo que definirá al gobierno y las aspiraciones de Claudia Sheinbaum a la candidatura presidencial de MORENA. ¿Qué tan importante es Serranía para Sheinbaum que la necesita libre e impune, a darle justicia a 26 familias que hoy están incompletas?