Por. Bárbara Lejtik
Es nuestro derecho y nuestro deber.
Ven pensando en ellas, en las que ya no están.
No importa si te consideras feminista o no,
ven estés o no a favor del aborto,
ven con el color de pañuelo que quieras,
puedes gritar las consignas que tú prefieras,
las que te representen, las que te cimbren el corazón.
No es necesario que destruyas nada.
Ven porque tú y yo somos voces que juntas no podrán callar.
Por las que ayer gritaron y hoy ya no pueden,
por esa amiga que está sufriendo,
por las veces que te ha dado miedo salir a la calle,
por quienes no tienen voz.
Por las ancianas, por las jóvenes, pero sobre todo por las niñas.
Hoy más que nunca debemos estar juntas, aunque nos hayan enseñado a crecer divididas, juzgándonos entre nosotras.
Porque sororidad también es entender que hay muchos tipos de mujeres y ninguna merece sufrir por ser quien es.
Ven porque te necesitamos, porque nos necesitamos, porque juntas somos más fuertes, porque para gritar “Ni una más” es necesario que nos tomemos de la mano y hagamos valla.
Porque crecimos con miedo y esto tiene que cambiar,
porque podemos ser libres y salir a las calles seguras
porque se puede vivir de otra manera,
porque no tenemos que soportar ningún tipo de acoso ni de humillación.
Ven porque queremos que nuestras hijas se sientan felices y plenas de ser mujeres.
¡Ven por favor!
No te escondas
No te calles
No toleres más
No sueñes con un mundo distinto para nosotros, luchemos juntas por él.
No es una lucha contra los hombres, nunca lo ha sido, es una lucha contra algunos hombres y también algunas mujeres, y una ideología que no nos permite crecer, que nos opaca, que nos limita y minimiza.
Es nuestro deber y nuestro derecho.
Es una lucha por la equidad, por la justicia, por la libertad.
Ven por las que lo hicieron en el pasado, por las que quemaron vivas, por las que persiguieron, por las que llamaron locas.
Ahora nos toca a nosotras, esta lucha es nuestra, nadie más que nosotras va a a representarnos en esta trinchera.
No temas, somos muchas, somos todas, son las mujeres del pasado y las que no han nacido aún, pero que se merecen un mundo que respete, honre y reconozca nuestro valor y nuestros derechos.
Jamás llames “feminazis” a quienes luchan, ese término habla de muerte y odio, nosotras luchamos por la paz y por la vida.
Haz una bandera, invita a más amigas, grita muy fuerte.
La lucha es dura pero estoy segura que valdrá la pena.
Nos quiero ver allí, unidas, solidarias, fuertes.
Ven a gritar:
¡Vivas nos queremos!
Porque si eres indiferente a la violencia que hemos sufrido en la historia, porque si prefieres vivir con miedo, entonces estás muerta en vida.
La cita es hoy a las 16:00 horas en el Monumento a la Revolución, lleva carteles, viste de los colores que representen tu ideología, pero sobre todo, vístete de valor y de dignidad.
Caminaremos juntas, las veces que sean necesarias, en nosotras está el cambio.
¡Ven a la marcha!