Por Ivonne Melgar y Ximena Mejía
Después de que diputadas de todas las fuerzas políticas le reclamaron la pretensión de eliminar el tipo penal del feminicidio, el fiscal Alejandro Gertz Manero les confesó vivir el impacto emocional de afrontar, cotidianamente, la impunidad que ha convertido a México, dijo, en un país de víctimas.
“No tienen ustedes idea lo que es recibir el impacto del crimen organizado, de lo que está sucediendo todos los días. Produce una angustia profunda. Todo lo que nosotros vemos. No solamente que no está saliendo bien, sino que está saliendo mal. Nos preocupa”, expuso el titular de la FGR.
Gertz Manero pidió a las diputadas diseñar en lo que resta de febrero, de manera conjunta, la futura tipificación penal del feminicidio, a fin de atender los problemas técnico jurídicos que ahora presenta y que impiden la aplicación de penas más severas a quienes lo comentan.
Ofreció establecer los agravantes y la reparación del daño que ahora no se tienen para juzgar a los feminicidas.
“Nunca se ha propuesto eliminar el tipo penal del feminicidio. Sólo se va fortalecer la defensa de las mujeres, niños y niñas”, prometió el fiscal, ganándose el aplauso de quienes lo había recibido con reclamos.
Y es que Gertz Manero acudió a la convocatoria de la presidenta de la Cámara, Laura Rojas, para revisar los cambios legislativos en este tema, prioridad del grupo plural de igualdad sustantiva en San Lázaro, donde el más reciente asesinato de una mujer, en manos de su esposo, marcó las intervenciones.
“La muerte de Ingrid es un caso terrible por el que pedimos endurecer las penas”, dijo Patricia Sosa (PES).
“Casos como el de Ingrid nos degradan como sociedad”, señaló Martha Tagle (Movimiento Ciudadano) al invitar al fiscal a ponerse los lentes del enfoque de género.
“Lo que ha faltado es atención a esta problemática, reconocer una estrategia fallida de seguridad y que, lejos de molestarle al Presidente que estos crímenes, como el de ayer, de Ingrid, opaquen su mañanera, deberían ser motivo para fortalecer el sistema de justicia”, reclamó Érika Sánchez (PRI).
Pero eso fue antes de la oferta de integrar ya un equipo técnico de trabajo para el que las legisladoras se dijeron listas, bajo la condición de no retroceder en el enfoque de género, porque no es lo mismo, alegaron, la muerte de una mujer en un accidente de tránsito que por asesinato de su pareja.
Al final hubo fotos y el elogio de la vicepresidenta Dulce María Sauri (PRI): “Es usted una especie de seductor desde el punto de vista jurídico”.
Fuente Excélsior