Apenas este jueves la Corte Suprema de Brasil determinó por seis votos a cinco que las penas de prisión no pueden empezar a ejecutarse antes de agotar todos los recursos legales, una decisión que debería conducir a la liberación del expresidente izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva.
“Una vez que conversemos con Lula este viernes, llevaremos al juez de ejecución de penas un pedido para su liberación inmediata, con base al resultado de ese juicio del Supremo Tribunal Federal (STF)”, informó el bufé Teixeira Martins en un comunicado el jueves.
El expresidente brasileño permaneció 1 año y 8 meses en una carcel donde purgaba una condena de 12 años 11 meses de prisión por corrupción y lavado de dinero.
Lula ha apelado al caso que lo había mantenido encarcelado y el cual está relacionado con la presunta compra de un apartamento frente al mar en el estado de Sao Paulo.
Lula, que fue presidente de Brasil de 2003 a 2010, asegura que el caso en su contra tiene motivos políticos. El exmandatario no pudo contender en las elecciones presidenciales de 2018 debido a su condena.