Redacción / México.- Dos sujetos desconocidos allanaron ayer domingo el domicilio de la periodista Lydia Cacho. Robaron equipo de trabajo y material periodístico altamente sensible, además mataron a una perra que protegía la casa y otra fue envenenada, denunció la organización Artículo 19.
“Se trata de un acto de represalia por su ejercicio de defensa de derechos humanos y de su libertad de expresión” refirió Artículo 19.
De acuerdo con los reportes, los agresores irrumpieron al domicilio en Puerto Morelos, Quintana Roo, a las 18:30 horas, aproximadamente, después de romper los cables de las cámaras de seguridad y desactivar la alarma. Sustrajeron equipo de trabajo, incluyendo una grabadora de audio, 3 cámaras fotográficas, varias tarjetas de memoria, una computadora portátil, y 10 discos duros con información de alto interés público relacionada con casos de pederastia. Afortunadamente, la periodista tiene respaldos de seguridad en el extranjero.
Además del robo de información, desordenaron su recamara, destrozaron objetos, entre ellos fotografías familiares y ropa interior.
Esto sucede en el contexto de la búsqueda de justicia de Lydia Cacho por la tortura a la que fue sometida en 2005 por parte de un grupo criminal de poder encabezado por altos funcionarios y empresarios de los estados de Puebla y Quintana Roo, destaca un comunicado de Artículo 19.
Expertos en seguridad, consultados por la periodista después del allanamiento, aseguran que “iban por ella” y que, afortunadamente, no se encontraba en su hogar.
Para Artículo 19, las agresiones del día de ayer constituyen un ataque frontal a la búsqueda de justicia de Lydia, que ha llevado más de 14 años. En su momento el CDH señaló que “las agresiones que sufrió la periodista habían sido focalizadas y con contenido discriminatorio en razón de género y connotación sexual”. El mismo patrón sucedido en el 2005 se repite en las agresiones de ayer; la ruptura de fotos familiares, de su ropa íntima y el asesinato de su perra, pretenden dar un mensaje amenazador e intimidante para la periodista, destacaron.
Ante este acto intimidatorio y de agresión a la periodista, Artículo 19 exigió a la Secretaría de Gobernación y a la Fiscalía General de la República, especialmente a la FEADLE, se cumplan las garantías de no repetición, se garantice su seguridad y su vida en todo momento y se sancione a los responsables de estos hechos.
Por su parte, Lydia Cacho escribió en su cuenta de Twitter que a pesar de lo sucedido en su domicilio “no dejará de investigar”: