Los ataques, la violencia y los asesinatos de periodistas registraron en 2018 al menos 80 profesionales de la información asesinados, lo que significa un aumento significativo respecto a los casi 60 que murieron en 2017, señaló Reporteros Sin Fronteras (RSF).
Al presentar su Informe Anual 2018 en la capital española, la organización afirmó que el mencionado periodo “ha sido testigo de un significativo incremento de los actos violentos contra profesionales de los medios de comunicación”.
Detalló que además de los periodistas asesinados en 2018 también 348 fueron encarcelados, frente a los 326 del año anterior. Más de la mitad de los informadores en prisión se concentran en solo cinco países: Irán, Arabia Saudí, Egipto, Turquía y China, que se mantienen como las mayores cárceles de periodistas del mundo, enfatizó Reporteros Sin Fronteras.
También se incrementó el número de secuestrados, que pasó de los 54 de 2017 a los 60 del año pasado. La mayoría de ellos se encuentran cautivos en países como Siria, Irak y Yemen.
Según RSF, Afganistán es al país más mortífero del planeta para este tipo de profesionales con 15 periodistas asesinados en 2018, seguido de Siria (11) y México (nueve), que ostenta “el triste honor” de ser el país sin conflicto bélico más letal para el ejercicio del periodismo.
El organismo gremial destacó que países como China o Vietnam se mantienen como censores despiadados, mientras que la India y Bangladesh destacan por un extremismo religioso virulento de sus poblaciones hacia los comunicadores.
El azote de la violencia se ha hecho sentir con especial crueldad en América Latina, “no solo en México, sino también en países como Nicaragua, donde el poder libra una lucha sin cuartel para aniquilar al periodismo o en Venezuela, donde los informadores son víctimas de la inestabilidad extrema que afecta al país, desde hace años”, apuntó RSF.
El documento analiza cada año la evolución de la libertad de prensa en más de un centenar de países y señala los factores que influyen y determinan los avances o retrocesos: cambios legales, asesinatos, encarcelamientos, agresiones, censura y represión, entre otros puntos.