NTX / Buenos Aires.- La despenalización del aborto y del consumo de drogas personales serán temas centrales del nuevo Código Penal de Argentina, cuya presentación se postergó debido a las polémicas anticipadas que desató el proyecto.
El presidente Mauricio Macri encabezaría este martes un evento para presentar la iniciativa de reforma del Código Penal que enviaría al Congreso para su aprobación, rechazo o modificación.
La ceremonia se canceló, sin embargo, debido a los reclamos previos por los cambios propuestos en torno al aborto y que se filtraron a la prensa.
El proyecto era muy esperado porque el gobierno había especulado con la posibilidad de subsanar el reclamo social después de que el Senado rechazara el pasado 14 de agosto la legalización del aborto hasta la semana 14 de gestación que sí había aprobado la Cámara de Diputados.
Como alternativa, el nuevo Código Penal incluía una modificación para que las mujeres que abortan ya no sean penadas con uno a cuatro años de prisión, como lo establece la norma actual, sino con uno a tres años, lo que lo convertiría en un delito excarcelable.
El cambio fue rechazado por feministas y políticos oficialistas y opositores, ya que ni siquiera la despenalización total alcanza, pues si bien ya no implicaría riesgo de prisión, tampoco habría garantía de una atención médica adecuada para evitar muertes por abortos clandestinos.
Por otra parte, la reforma proponía la despenalización del consumo de drogas ilegales y del autocultivo de marihuana, reclamos que vienen creciendo en los últimos años.
En 2017, el Congreso aprobó la legalización de la marihuana con fines medicinales, pero mantuvo la penalización en contra de los autocultivadores, por lo que los cambios fueron considerados insuficientes.
Ahora, el Código Penal reabrirá esa discusión y la del consumo, ya que plantea que los usuarios sólo serán penados sólo si se les encuentra en posesión de una excesiva cantidad de sustancias o si consumen fuera del ámbito privado.
Actualmente hay cientos de personas que fueron detenidas porque se les encontró un cigarrillo de marihuana o algunos gramos de cocaína, lo que cambiaría en la nueva norma.
De aprobarse la reforma, Argentina se sumaría a la oleada de países que modifican la lucha contra el narcotráfico a partir de la descriminalización de los consumidores, quienes, si tienen consumo problemático deben ser considerados enfermos y no delincuentes.