Iyari es una artista precoz y prometedora, ya que inició su formación en las artes plásticas apenas a la edad de un año, haciendo sus primeros trazos en el Taller de Artes “La Buchicata”, en Santa Cruz Xoxocotlán, Oaxaca.
Su primera exposición pictórica colectiva, intitulada “La Cosmogonía del Color”, la hizo en el café Los Cuiles en Oaxaca, Oaxaca, al lado de reconocidos artistas plásticos oaxaqueños, como son Fernando Olivera, Calixto Robles y Demetrio Barrita, quienes desde un inicio reconocieron el inusual talento de Iyari.
Después se incorporó al Taller de Artes Plásticas de la Casa de Cultura de San Bartolomé Quialana, en Tlacolula, Oaxaca, comunidad zapoteca donde participó junto con los alumnos del taller en dos exposiciones colectivas. Y, a la edad de cuatro años, formó parte del Taller de Artes Plásticas de la Casa de Cultura Putleca, contribuyendo con su obra a la instalación de cinco exposiciones colectivas.
Desde los tres años vive en Putla Villa de Guerrero, Oaxaca, donde ha crecido abrevando de la riqueza cultural que nutre e inspira sus creaciones: las fiestas y las costumbres de las comunidades indígenas, donde los paisajes naturales hacen comparsa con ricos guisados y vestidos de hilado tradicional, muestra del multicolorido y expresivo arte textil oaxaqueño.
A Iyari le gusta viajar, porque en cada viaje descubre nuevas tonalidades y combinaciones de colores, siendo sus preferidos lo que ha encontrado en la mixteca oaxaqueña y la sierra mixe. Su cercanía a la música ancestral no le ha impedido apasionarse con la música clásica, el rock, la big band jazz y el soul. Iyari toca la flauta dulce y está aprendiendo a tocar el corno francés y la trompeta, ya que sus inquietudes artísticas parecen desbordarse más allá de la pintura.
Le gusta estudiar historia y ciencias naturales, así como leer cuentos y fábulas infantiles. Su poema favorito es Margarita de Rubén Darío, que suele repetir de memoria. Y juega, juega mucho, como cualquier niña de su edad.
Su recién inaugurada exposición individual, “Corazón de Nube”, nace a partir de la revisión que hizo Iyari de una carpeta de dibujos que hacía tiempo tenía guardada. Ahí encontró varios dibujos de corazones que decidió pasar a pintura como una actividad en su actual temporada vacacional de verano.
Desde el 29 de julio, dicha exposición está a la vista del público en las instalaciones del Café Labrador. La exposición está compuesta por 10 piezas pictóricas donde, sobre todo, Iyari hace una interpretación colorida e intimista, desde su mirada infantil, de los sentimientos que suele almacenar el corazón de forma cotidiana.
La obra artística de Iyari se mueve entre el expresionismo abstracto y la abstracción lírica, con motivos naturalistas e indígenas, a partir de una introspección sentimental centrada en el corazón y enfocada desde la inocente visión de una niña que vive rodeada de colores selváticos, sonidos comunales y cariños familiares.
Iyari juega con colores fuertes y trazos firmes, aderezados con algunos tonos pastel, que lo mismo exploran sentimientos en las raíces de las plantas que en las noches diáfanas y estrelladas de las tierras oaxaqueñas.
Estamos, sin duda, ante una joven promesa de las artes plásticas oaxaqueñas, a quien hay que seguirle la pista.
Les dejo algo de la obra pictórica de Iyari Yoots Díaz Alarcón:
NB: las imágenes, pinturas e información sobre Iyari Yoots Díaz Alarcón se publican con autorización de los padres de la artista y de la artista misma, en cumplimiento de las normas de protección a la infancia. Las fotos nos fueron proporcionadas por la madre de Iyari.