Margarita Zavala Gómez del Campo está a punto de convertirse en candidata a la presidencia de la República. Lo sería sin tener el apoyo de un partido político.
La noticia debería darnos gusto, pero no.
Militante por 33 años del partido Acción Nacional, dejó a esa agrupación para buscar apoyo ciudadano y ser candidata independiente. Parece que lo logró, pero la forma en que conquista la nominación es tramposa.
Hace unos tuits, la señora Zavala se proclamaba como la “candidata del pueblo”, “la candidata de más de un millón de mexicanos”, pero la realidad es otra.
Según el INE, Margarita Zavala recibió un millón 578 mil 774 firmas de “apoyo”. A esa cifra hay que hacer una resta. Presentó “duplicados mismo aspirante” 132 mil firmas; también quiso hacer válidas 13 mil 358 firmas del padrón electoral, no de la lista nominal.
De las firmas presentadas, 10 mil 193 ya estaban dadas de baja en el Registro Federal de Electores. No se encontraron 4 mil 949 y 704 estaba fuera del régimen de excepción. Las inconsistencias sumaron 327 mil 456.
Al final de esto, la señora Zavala tenía un millón 89 mil 512 firmas. Pero faltaba otra resta.
Simuló obtener 432 mil firmas. Fotocopias, no credenciales de elector originales fueron 212 mil 198 y 6 mil 714 documentos no válidos. Es decir, Zavala alcanzó a validar sólo 870 mil 168 firmas legales.
Los independiente requería de 866 mil 593, por lo que la diferencia entre lo requerido y lo alcanzado fue de 3 mil 575 firmas. De los 17 estados en los que debían dispersarse esas firmas, Zavala obtuvo 21 y, según el INE, de lo presentado por Margarita Zavala es procedente el 55 por ciento.
¿Qué pasa con el 45 por ciento que fue invalidado? Nada. El INE determinó que ella, Margarita Zavala, debía ir a la boleta electoral. 708 mil 262 firmas fueron apócrifas, falsas, truqueadas. Zavala pregonaba y presumía su millón de firmas ciudadanas para ser candidata.
Casi la mitad de las firmas fueron producto de un fraude. Y así, será candidata a menos que el Tribunal Electoral decida que, por violentar la legalidad del procedimiento al presentar tal cúmulo de irregularidades le niegue la posibilidad del registro y ordene a las instancias competentes, que actúen por violentar las leyes y reglamentos de la protección de datos personales.
¿Cuántas de las firmas válidas son realmente reales? Ojalá que el INE, al igual que esa página que tiene para que un ciudadano revise si está inscrito en los padrones de los partidos sin su consentimiento, tenga un instrumento igual para que los ciudadanos verifiquen si su firma, sin haberlo consentido, se usó para “validar” las aspiraciones de la señora Zavala.
Desde hoy, puedo asegurar que Margarita Zavala estará en la boleta. Le es útil al pacto que existe entre Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto.
Al final del camino, y una vez que hayan bajado de la contienda -si pueden- a Ricardo Anaya, Calderón y Peña Nieto decidirán entre José Antonio Meade y Margarita Zavala quien les es más conveniente para su proyecto.
La Letrina. El PRI entregó la noche de ayer su lista para candidatos plurinominales.
Por la tarde, trascendieron algunos nombres de quienes serán candidatos.
Uno de esos nombres resalta en la lista de los pluris priistas: Enrique Ochoa Reza, presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PRI. Iría a San Lázaro. Esta es un señal clara e inequívoca de que el presidente del PRI no confía, primero, en el triunfo de su candidato presidencial y, segundo, en el caso de que Meade ganara, no está en el ánimo del candidato.
¿A poco Ochoa Reza necesita fuero? Lo único que hizo fue, además de dar contratos de la CFE sin licitar, cobrar una liquidación que por ley no le correspondía.