En los últimos meses, Corea del Norte ha estado en el ojo del huracán, ya que su presidente Kim Jong-un, ha fortalecido su poderío militar y no se cansa de hacer diferentes pruebas con misiles, cuyos alcances podrían suponer que se están preparando para una guerra, incluso ha lanzado amenazas contra Estados Unidos, iniciando una pelea de niños junto a Donald Trump, solo que a diferencia de un niño de verdad, ellos tienen juguetes nucleares.
¿Y a qué viene todo esto? A partir del próximo 9 de febrero, en PyeongChang, Corea del Sur, se disputarán los Juegos Olímpicos de Invierno, a los cuales, no iban a asistir los atletas de norcorea, por los eternos conflictos políticos que existen entre las 2 Coreas. Tras diferentes reuniones entre ambos países, acordaron que participarán como un solo equipo, un solo país, y desfilarán con la misma bandera en dicha competencia, siempre y cuando el Comité Olímpico Internacional acepte la participación de los deportistas del norte.
Una vez más, el deporte ha sido la herramienta, el instrumento que lleva a la unión entre países, aunque en ocasiones, no lo ha conseguido, ya que algunos han boicoteado las competencias olímpicas, como Holanda, España y Suiza en Melbourne 1956 por la represión soviética a la revolución de Hungría; 20 años después, en Montreal, 24 países africanos e Irak, hicieron lo propio ante la negativa de suspender a Nueva Zelanda por sus políticas racistas. Moscú 1980 tuvo la ausencia de más de 65 naciones por la invasión soviética de Afganistán.
Las coreas ya habían tenido un conflicto político-deportivo antes, y fue en los olímpicos de Seúl 1988, cuando el COI pidió abrir la frontera intercoreana para que Corea del Norte pudiera ser sede junto con Corea del Sur de esta competencia, por supuesto que esto no sucedió y el boicot junto con los del norte fue apoyado por Cuba, Nicaragua, Albania y Etiopía.
Uno de los gestos deportivos de tintes políticos más recordados en Olímpicos, fue el saludo del “Poder Negro”, en México 68, cuando los estadounidenses Tommie Smith y John Carlos, ganadores de medallas en la prueba de 200 mts, levantaron sus puños durante el himno de su país, en protesta a los derechos de la raza negra.
Sin duda, eventos masivos como Juegos Olímpicos o Mundiales de Futbol, son el escenario utilizado por muchos políticos para mostrarle al mundo su poderío, a su gente, su cultura, pero también, es un lugar de expresión para los atletas, que intentan ser la voz de su pueblo.
Jorge Alejandro Rubio Pérez. Director de Deportes TV Educativa.