La memoria es la facultad de adquirir, almacenar y recuperar información.
Olvidar es una acción involuntaria que consiste en dejar de recordar.
De acuerdo con la psiquiatría, los recuerdos no desaparecen, sólo pasan al inconsciente.
Luego de presentar este esquema, quiero proponer que el olvido (para variar en la limitadísima capacidad de oferta política de los representantes populares en México para mantenerse en sus posiciones) es la apuesta de todos los que sacarían alguna tajada con el caso de Javier Duarte de Ochoa.
Ya es más de un mes de la «espectacular» captura del ex gobernador de Veracruz en Guatemala, que le dio parque a todos los medios de comunicación para tener de qué hablar (también en su paupérrima oferta), y no existe ninguna acción conocida de las autoridades mexicanas para presionar por su regreso a territorio nacional y que sea procesado.
Lo último que se supo fue que Duarte, acostumbrado a la voluptuosidad, la opulencia y la comodidad en todo sentido, se quejó porque no tenía colchón en la cárcel y porque quería salir a convivir con sus compañeros de prisión.
Se supone que la PGR debería haber enviado desde hace ya algunas semanas la solicitud al gobierno guatemalteco para extraditarlo, pero nada.
El subconsciente (que es el salvador de los recuerdos, como lo dije al principio) les trajo a la superficie de la conciencia a muchos que la estrategia del lobo encadenado en oferta a las ovejas, ya es un lugar común; es decir, que la captura es parte del estratagema del PRI de cara a las próximas elecciones en diversos estados de la República y la federal.
Conforme pasan las hojas de los calendarios, en especial de los electorales, se verá que los jueguitos para la memoria crecerán a propósito de Duarte y todos sus significados. El reto estará en la crítica que los ciudadanos tengan sobre sus recuerdos.
Mario López cuenta con 42 años en el ejercicio periodístico en Televisa y el periódico Ovaciones. Realizó las principales coberturas de los procesos judiciales: caso Colosio, caso Ruiz Massieu, caso Paco Stanley y diversos juicios instruidos en contra de capos vinculados con delincuencia organizada y narcotráfico.