Algo acerca del volado o alternativa que podrían ser los Independientes.
¿Será que los independientes podrán convertirse en una alternativa real en las futuras elecciones en varios estados de la República Mexicana este 2017 y en la madre de todas las elecciones, la presidencial en 2018? Independientes, genuinos tal vez, independientes fake; piratas o impostores, difícilmente.
Lo de moda para los mercaderes de la política, esos que se dicen en llamar políticos profesionales, lo aceptable o presentable hoy en día, es autoproclamarse como independientes, aunque sólo sea un disfraz para tratar de cubrir todos los malos antecedentes políticos y quitarse el lastre que significa haber pertenecido a uno o varios partidos según haya convenido a sus intereses personales,; ir de la derecha a la izquierda o de la izquierda a la derecha, viceversa… dar el llamado chapulinazo (brincar a otro encargo importándole un bledo sus representados), según lo que más les convenga a ellos y nunca procuran velar por los intereses de quienes pagan sus salarios y sus prerrogativas.
Y es que los partidos políticos mexicanos, en su mayoría, pero principalmente PRI, PAN, PRD y PVEM, han caído en un desprestigio ante el electorado, debido a los graves escándalos de corrupción de sus militantes, y por haber actuado contrario a los intereses de los que dicen representar.
Sin ir más lejos, todos estos partidos votaron por el aumento de impuestos incluyendo el aplicado para el alza del precio de las gasolinas, que ha provocado no el último #Gasolinazo sino también los anteriores. En el gobierno de Felipe Calderón, estos partidos y sus integrantes aprobaron las reformas fiscal y energética que tienen hoy a millones de mexicanos contra la pared, tronándose los dedos para que alcance el salario para sobrevivir, y sin conocer a ciencia cierta los acuerdos inconfesables que pactaron con las trasnacionales que parecen haber finiquitado la entrega de lo que quedaba de petróleo mexicano.
Hay en México unos políticos, muy pocos genuinamente independientes, que surgen como tales y que no traen el lastre de haberse acomodado en derechas o en izquierdas a conveniencia. Por ejemplo, Pedro Kumamoto, primer candidato independiente en ganar una elección en Jalisco y Héctor Armando Cabada Alvídrez, actual presidente Municipal de Ciudad Juárez, antes conductor estelar del noticiero nocturno del Canal 44 de esa ciudad; así como algunos otros candidatos en diferentes estados que no alcanzaron los votos suficientes para ser electos, porque fueron arrollados por la aplanadora partidista o perdieron porque eran ex integrantes de partidos y les pareció oportuno disfrazarse de independientes, pero no lograron engañar.
Y están los otros, “Los impostores”, los fake que tramposamente ahora se quieren hacer pasar por puros e impolutos, que ya no quieren cargar con el estigma de pertenecer a un partido corrupto (económica, social y políticamente hablando) sólo porque ya no les conviene, ya no es negocio redituable, ni social, ni políticamente.
“Los impostores”, película de título original “Matchstick men”, también conocida como “Los Tramposos” en Hispanoamérica, dirigida por Ridley Scott y protagonizada por Nicolas Cage como Roy Waller y Sam Rockwell como Frank, que interpretan a un par de estafadores.
Dos estafadores profesionales de poca monta –Roy, el veterano del dúo y Frank, su joven y ambicioso protegido– venden “sistemas de filtrado de agua” de mala calidad a precios prohibitivos, prometiendo atractivos regalos para el comprador: coches, joyas o cruceros tropicales, que sus víctimas nunca llegan a recibir.
En la película, las estafas de los tramposos, impostores, lamentablemente son exitosas. Esperemos que los independientes, fake, no logren engañar al electorado ni en 2017, ni en 2018. Los regalos prometidos nunca llegarán y el filtrado de agua que convierte a ésta en elixir no es tal.
Constancia de antecedentes políticos
Así como en un nuevo empleo se solicita una constancia de antecedentes penales, o no, debiera exigirse a los políticos que buscan ser votados una constancia de antecedentes políticos, para saber si han hecho de la grilla su modus vivendi, su modus operandi o su modus aprovechandi, para saber cómo han actuado a lo largo de su carrera. Mercenarios que veámos de pseudoindependientes, no los queremos.
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Paloma Ruiz. Comunicóloga por la UNAM, con especialidad en Marketing por la Universidad de Berkeley. Ha combinado a lo largo de su vida profesional el análisis político en diversos medios de comunicación nacionales e internacionales, con el diseño de estrategias de comunicación y las relaciones públicas. Amante del mar y el buceo.