Los párasitos pueden provocar anemia y alergia en el felino.
Aunque nuestro gato no salga de casa pero notamos una constante comezón, es posible que tenga pulgas; estos parásitos además de transmitir algunas enfermedades pueden provocar anemia y alergia en el felino; en los casos más extremos puede generar enrojecimiento en la piel e incluso caída del pelo.
Este parásito al estar como huésped en el cuerpo del animal, puede llegar a poner alrededor de 600 huevecillos que son esparcidos, por lo que a los 14 días las larvas no solamente permanecen en el gato, sino que también pueden sobrevivir en las alfombras, camas y otros objetos o lugares que frecuenta nuestra mascota, así que se deben extremar los hábitos de limpieza en el hogar a fin de terminar con el ciclo de las pulgas.
Por lo general, los gatos las adquieren por estar en contacto con otros animales o bien porque tienen acceso al jardín, además de que el mismo propietario a través de su ropa o zapatos podría estar introduciendo este parásito en casa, ya que es casi imperceptible, pues una pulga adulta mide entre 2 y 4 milímetros.
Una vez que se ha detectado el problema, se debe acudir con el médico veterinario, el cual enviará el método más adecuado para su tratamiento, mientras que en el hogar se deben extremar las precaucione. Es necesario lavar y desinfectar la cama así como los juguetes del gato 15 días después del tratamiento para terminar el ciclo de reproducción de la pulga.
Actualmente, en el mercado se encuentran muchos productos de fácil aplicación para nuestras mascotas, pero siempre es recomendable acudir con los expertos, pues debe tomarse en cuenta el peso del animal porque podría resultar tóxico para ellos.
Entre las opciones para combatir a las pulgas están las pipetas para gato, la marca Frontline es una de las más comerciales y suele ponerse sobre la piel en la base de la nuca a fin de combatir hasta por 30 días el ciclo de estos parásitos, por lo que se ha vuelto una de las opciones más eficaces para combatirlas.
A la par del uso de la pipeta, algunos expertos recomiendan el uso de un peine antipulgas metálico que por sus dientes cerrados, permite quitar con mayor facilidad las pulgas o los restos de las mismas luego de haber usado la pipeta. Para mantener la higiene adecuada, se debe dejar el peine en una solución jabonosa a fin de eliminar cualquier huevecillo o larva.
La marca Hartz y Bayer tiene una gama de collares anti pulgas y garrapatas, tanto para perros como para gatos que promete proteger a nuestra mascota hasta por 7 meses y son repelentes al agua, además de que pueden ser usados por gatitos mayores a 12 semanas. Sin embargo, algunos veterinarios no lo recomiendan por completo debido a que contiene sustancias tóxicas que podrían provocar reacciones alérgicas e incluso pérdida de pelo. La manipulación de este collar puede generar alergias también en los seres humanos y es por eso que luego de ser colocado correctamente, se deben de lavar las manos para evitar alguna reacción.
Otra de las alternativas es el talco Bolfo de Bayer, el cual se aplica en el pelaje del gato e incluso se puede poner en su cama y en algunos otros lugares que frecuenta nuestro felino; conjuntamente se le debe cepillar frecuentemente para poder eliminar los restos de las pulgas que aún podría tener nuestro gato.
Finalmente, una manera adecuada para combatir este problema, es bañar al gato con un shampoo antipulgas, pero este procedimiento solamente es recomendable para aquellos dueños que acostumbraron desde los primeros 4 meses de vida al felino a este procedimiento, puesto que un gato adulto podría sentirse nervioso y tener una experiencia traumática. La manipulación del felino debe hacerse con cuidado para evitar lesiones severas en la piel.
Es importante señalar que la clave está en el uso constante de estos tratamientos, pues no existen fórmulas mágicas que erradiquen de la noche a la mañana las pulgas; lo más adecuado es dar seguimiento al tratamiento que mandó el Mvz a fin de controlar este problema. Tampoco se debe recurrir a remedios caseros que podrían perjudicar el pelaje o la piel del gato que es muy sensible, y mucho menos usar productos antipulgas de perros en los felinos, puesto que podrían poner en riesgo su salud.
Alejandra Forero. Egresada de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (UNAM), fanática del estilo Kawaii y los colores estridentes, además del anime japonés. Catlover de profesión, promotora de la ailurofilia (es momento de romper con todos los mitos negativos que hay alrededor de estos enigmáticos seres, los felinos).