La iglesias y los partidos se oponen al matrimonio igualitario.
El 25 de mayo, la Unión de Padres de Familia, la Red Familia y el Consejo Coordinador de Movimientos por la Vida y la Familia, anuncian que más de mil organizaciones en 27 entidades, entre las que se encontraban ConFamilia, ¡Dilo Bien!, CitizenGO, México es Uno para los Niños y Hazte Oír, se integraban en el Frente Nacional por la Familia (FNF), con una agenda de movilización centrada en la oposición a la iniciativa presidencial de matrimonio igualitario.
Este movimiento, no sólo está respaldado por la Iglesia Católica, sino además por las cristianas y evangélicas, y otras como la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (Mormona). Comparten sus banderas, no nada más con el Partido Acción Nacional y el Partido Encuentro Social, sino también los grupos más conservadores del resto de los partidos políticos. Tampoco caminan aislados, están vinculados a colectivos de diversos países, entre los que destacan los de la región, en donde ya están pensando en la conformación del Frente Latinoamericano por el Derecho a la Vida y a la Familia. Ahí están los grupos conservadores de Perú, Guatemala y El Salvador en lucha contra la “ideología de género”; organizaciones religiosas de Panamá con su batalla contra un proyecto de Ley 61 sobre educación sexual; el Frente Parlamentario Evangélico de Brasil con su agenda homofóbica y el Partido de la U de Colombia, protagonista de las recientes protestas contra la cartilla de educación sexual en ese país, y cuya diputada Ángela Hernández, participó en la marcha del 10 de septiembre, con viaje pagado por el PES mexicano.
Durante las últimas semanas se ha venido documentando cómo los aliados, promotores y protagonistas del FNF, mienten para ganar adeptos. Lo hacen cuando niegan las evidencias científicas que sustentaron que la homosexualidad dejara de ser considerada como una enfermedad por la OMS. No dicen la verdad cuando afirman que a su marcha del 10 de septiembre asistieron 1 millón 200 mil personas, cuando los datos oficiales y de prensa reportan la participación de una tercera parte de esa cantidad.
Mienten cuando circulan imágenes de libros de ediciones españolas y argentinas, señalando que correspondía a libros de texto de preescolar y primaria. ¡No te dejes engañar! ¡Es falso! ¡Son rumores! Son algunas de las expresiones que el Secretario de Educación, Aurelio Nuño ha utilizado para referirse a la campaña sobre sexo explícito y promoción de relaciones sexuales tempranas, la homosexualidad y el aborto, que supuestamente están incorporados en los programas educativos oficiales. No es verdad que la educación de la sexualidad y de salud, que promueven los programas locales y federales, susciten que niñas, niños y adolescentes tengan relaciones con adultos o que puedan cambiarse de sexo, y en este sentido, es por demás absurdo señalar que los padres que se opongan podrían ser encarcelados.
Si bien es cierto que la Convención de los Derechos del Niño, considera que vivir en familia es un derecho primordial de los infantes, es mentira, que considere como familia, lo que ellos denominan como natural. Al contrario el Comité de los Derechos del Niño en su Observación General 7 (2005), señala de manera textual: El preámbulo de la Convención se refiere a la familia como “el grupo fundamental de la sociedad y medio natural para el crecimiento y el bienestar de todos sus miembros, y en particular de los niños”. El Comité reconoce que “familia” aquí se refiere a una variedad de estructuras que pueden ocuparse de la atención, el cuidado y el desarrollo de los niños pequeños y que incluyen a la familia nuclear, la familia ampliada y otras modalidades tradicionales y modernas de base comunitaria, siempre que sean acordes con los derechos y el interés superior del niño.
A unos días de verificarse su marcha nacional, el próximo 24 de septiembre, están colocando a través de la Arquidiócesis Primada de México, que el COPRED estaría en la disposición y posibilidades de encarcelar a los participantes por homofóbicos. El vocero abona con una interpretación que no distingue entre actos, conductas y manifestaciones discriminatorias a la generación de un imaginario de miedo y de poca tolerancia. Una mentira más, en un contexto que les incomoda, porque los habitantes de la CDMX podemos convivir con la iluminación del Ángel, el #SiAcepto la igualdad de derechos y la libertad de expresarse del FNF.
El escritor José Saramago se refería a la Guerra de Irak, que la mentira circula impunemente por todas partes, se ha erigido en una especie de otra verdad… la mentira como arma, la mentira como vanguardia de los tanques y de los cañones, la mentira sobre las ruinas, sobre los muertos, sobre las infelices y siempre frustradas esperanzas de la humanidad. George Bush, afirmaba, expulsó la verdad del mundo para, en su lugar, inaugurar y hacer florecer la edad de la mentira.
El FNF y sus aliados van por esa ruta. Es necesario que no permitamos que las mentiras nos contaminen. Valoremos nuestro derecho a tomar decisiones y construir nuestras opiniones basadas en información suficiente y apegada a evidencias. Por eso, sin duda es necesario que nos sumemos a #TODOSomosFamiliaINFORMATE
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Nashieli Ramírez. Directora de Ririki Intervención Social. Experta en infancia y adolescencia, y sus derechos.