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«LA VENTANA ABIERTA»: Depilación y virus del papiloma humano

La creciente moda de depilarse el vello púbico

El virus del papiloma humano VPH, es la infección de transmisión sexual (ITS) tan común que la mayoría de los hombres y las mujeres sexualmente activas lo contraen en algún momento de su vida. Existen distintos tipos de VPH. Algunos de ellos pueden causar problemas de salud como verrugas genitales y cánceres. Pero hay vacunas que pueden evitar que estos problemas de salud ocurran.

¿Cómo se transmite el VPH? Al tener relaciones sexuales orales, vaginales o anales con una persona infectada del virus. Se transmite con mayor frecuencia durante las relaciones sexuales vaginales o anales. El VPH puede transmitirse incluso cuando la persona infectada no presenta signos ni síntomas.

Toda persona sexualmente activa puede contraer el VPH, incluso si tiene relaciones sexuales con una sola persona. También es posible que presente los síntomas años después, lo que dificulta saber cuándo se infectó por primera vez.

Este virus desparece por sí sólo en la mayoría de los casos y no causa ningún problema de salud. Pero cuando no desaparece, puede causar verrugas genitales o cáncer. Generalmente, las verrugas genitales aparecen como pequeños bultos o grupos de bultos en la zona genital. Las verrugas genitales pueden ser pequeñas o grandes, planas o elevadas, o tener forma de coliflor. Un médico especialista puede diagnosticar las verrugas en el área genital.

Hoy en día, existe la creciente moda de que hombres y mujeres rebajen o depilen el área del pubis, sin importar la edad o el estatus social la tendencia crece más y más sin considerar varios aspectos: la depilación púbica aumenta el riesgo de contraer enfermedades, ya que los rastrillos o ceras pueden originar pequeñas heridas sobre la piel abriendo la puerta de entrada al virus del papiloma humano, no visible a simple vista, afectando los genitales de ambos sexos.

El vello púbico constituye todo un factor protector durante las relaciones sexuales. Si ambos miembros de una pareja presentan un pubis sin vello, cualquier infección que se encuentre sobre la piel de uno de ellos pasará inevitablemente al compañero sexual para infectar y colonizar.

Lamentablemente los preservativos no alcanzan a cubrir las partes donde nace el vello y, por lo tanto, se puede producir contagio por contacto directo. Además, sólo basta con que la pareja toque con sus manos los genitales del otro para que el contagio ocurra.

Digamos que, en los últimos años, ha disminuido la conciencia social, el miedo a estas infecciones, sobre todo entre la población joven, de forma que ya no hablamos de grupos de riesgo, sino de prácticas de riesgo.

Como ya mencioné, con una sola pareja sexual podemos infectarnos y los riesgos aumentan entre las personas sexualmente activas con diferentes parejas. Así que bien vale la pena reflexionar sobre el cuidado de nuestra salud o si sucumbimos ante las exigencias de la moda.

Gerardo Guiza Lemus es licenciado en Ciencias de la Comunicación por la UNAM, consejero sexual y autor de los libros: Masculinidades, las facetas del hombre (traducido también al alemán), En el pecado está la penitencia, La historia no convenida, Artilugios, Quizás no entendí, Tus estelas en mi espacio, y Como la flor del amaranto.

 

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