Nunca nos han dicho qué negociaron Gobernación y la CNTE.
Se agotó el tiempo, sentenció Miguel Ángel Osorio Chong, el secretario de Gobernación de Enrique Peña Nieto.
La advertencia del hidalguense fue contra los maestros disidentes de Chiapas y Oaxaca, quienes se oponen a la llamada Reforma Educativa. Dice que la normalidad en esas dos entidades se ha visto sacudida por los bloqueos que realizan los miembros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).
Dicen que el desabasto de gasolina y alimentos ya afecta a la población. Asegura que ellos están abiertos al diálogo, pero que no han recibido respuesta de la contraparte.
Se acabó el tiempo, asegura el encargado de mantener la estabilidad política del país. Osorio Chong afirma que se ha lesionado a la población por semanas por las protestas, pero si durante tres años estuvieron sentados con los dirigentes de la CNTE, ¿qué fue lo que negociaron con ellos?
Se acabó el tiempo en que los mexicanos creímos que el gobierno federal había negociado cómo aterrizar su reforma en los estados bajo el control de la CNTE. Se terminó el tiempo en que la CNTE tenía el beneficio de la duda para explicar los motivos por los que no aceptan la reforma que los evalúa y les puede dejar sin trabajo.
Alguien dirá que se agotó el tiempo para que el gobierno, el jefe del Estado Mexicano ejerza el uso legítimo de la fuerza para defender los derechos de unos a transitar libremente, a pesar de que otros ejercen su derecho a manifestarse.
La fuerza ya se usó y fue letal. Nochixtlán está de luto. Y las imágenes que conocemos de aquel domingo sangriento son de agentes del gobierno disparando armas de fuego en contra de manifestantes.
Si la violencia ya llegó, ¿de qué tiempo agotado habla el secretario Osorio Chong?
El tiempo se agotó desde hace mucho para los políticos que integran el gabinete presidencial. No hay un México nuevo como resultado de las reformas que salieron del Pacto por México. La hacendaria nos hace pagar más impuestos y no vemos que reditúen nada ni en servicios públicos ni en seguridad. La energética abatiría los altos precios de los combustibles y la energía eléctrica. Y este mes suben las gasolinas y la electricidad.
La Reforma Educativa ya está manchada de sangre y la postura inflexible de gobierno y disidentes no se ve cuándo cambiará.
Nunca nos han dicho qué negociaron Gobernación y la CNTE la primera mitad de este sexenio.
Se agotó el tiempo, la paciencia; y hasta la credibilidad en los negociadores de ambas partes.
Con el tiempo agotado estamos a punto de ver a una CNTE más radicalizada y al gobierno ejerciendo más fuerza de la que usó en Nochixtlán. Sólo eso es lo que podemos esperar, pues ya no hay tiempo de más.