Redacción / En México, el cáncer de ovario ocupa el sexto lugar de incidencia en mujeres con 3 mil 277 casos nuevos al año, dijo el responsable del área oncológica del Hospital Regional de Alta Especialidad de Ixtapaluca, Raúl Guzmán Trigueros. De acuerdo con estimaciones de Globocan, existen dos mil 105 muertes asociadas cada año a este tipo de carcinoma.
El especialista aseguró que las cifras anteriores convierten al cáncer de ovario en uno de los tumores con mayor letalidad, debido a que su sintomatología es inespecífica, además de que no existen métodos específicos de detección, como mastografías en cáncer de mama.
“Si comparamos los factores de riesgo con el resto de la población, tienen mayor riesgo de presentarlo. En la detección oportuna en cáncer de ovario hay ciertas limitaciones, por lo que los síntomas son importantes”, explicó Guzmán Trigueros en conferencia de prensa.
Guzmán Trigueros destacó que, entre los factores de riesgo para contraer cáncer de ovario epitelial destacan la edad, pues se da entre los 40 y 60 años, así como infertilidad, endometriosis, menopausia tardía, obesidad, tabaquismo y tener algún paciente con cualquier tipo de cáncer.
El médico indicó que la mayoría de las pacientes llega con cuadros de colitis o gastritis, mismas que han pasado por médicos generales y gastroenterólogos, antes de llegar con el oncólogo.
“Un 58 por ciento van a tener un dolor abdominal que puede ser pélvico, síntomas urinarios o infecciones, incomodidad pélvica o abdominal. Estos síntomas pueden confundirse antes de que se piense que es cáncer”, señaló el oncólogo.
Así mismo, el servidor de la salud refirió que cuando llegan pacientes en una etapa avanzada, pueden presentar sangrado transvaginal anormal, dolor en área pélvica, pérdida de apetito, sensación de plenitud, pérdida de peso inexplicable, diarrea y aumento en el perímetro abdominal.
“Se dice que una de cada 10 mujeres va a tener un tumor de ovario a lo largo de su vida. Tanto tumores malignos como benignos. La única forma de saber si es cáncer, es por medio de una cirugía”, precisó.
“Los únicos estudios que se utilizan como método de detección, son exámenes clínicos una vez al año, un ultrasonido transvaginal y un estudio de sangre CA- 125 para el cáncer epitelial de ovario”, expuso.
El médico del Hospital de Alta Especialidad de Ixtapaluca, Raúl Guzmán Trigueros, indicó que el cáncer de ovario mientras más temprano identifique, existe mayor posibilidad de curación.
En etapas tempranas, 90 de 100 pacientes diagnosticados se pueden curar. “Todo lo contrario ocurre en etapas avanzadas, 15 de 100 pacientes van a estar vivos a lo largo de cinco años”, detalló. En México existen 16 hospitales acreditados y trabajan mediante convenio con el Seguro Popular para la atención del cáncer de ovario en 14 estados de la República, se detalló.