Por. Fernando Coca
En los últimos días, desde la oficina de la senadora Antares Vázquez, con el apoyo del Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano se ha emprendido una campaña en mi contra.
No puedo dejar de mencionar esto cuando en México el ejercicio periodístico está en la mira de intereses a los que la exhibición de datos que no les son favorables emprenden actos de acoso que pretenden intimidar.
La promoción de mensajes que incitan al odio por parte de un equipo que trabaja en el Senado porque sienten que se descalifica la aspiración presidencial de la jefa de Gobierno, la doctora Sheinbaum, han elevado el tono cuando cotidianamente se muestra lo mal que está la Ciudad de México y, en particular, el tema del Sistema de Transporte Colectivo Metro.
El hecho que tiene disgustados a los sheinbaunistas es que su campaña anticipada fue mostrada como un acto anticipado que ponía, incluso, en riesgo la aspiración presidencial de la funcionaria.
Los cientos de espectaculares que aparecieron en toda la República desquició la competencia interna en MORENA.
Me explico: inundar sin ton ni son las calles y avenidas del país con el perfil de la jefa de Gobierno, en donde destacaba su coleta de caballo, fue vista como una acción que emuló el exceso en el que incurrió Enrique Peña Nieto para promover su campaña fundada en el copete abultado que lo distinguió. La campaña de espectaculares de Sheinbaum nada que ver con las campañas que, en 2006, 2012 y 2018 realizó Andrés Manuel López Obrador. ¿Alguien recuerda tantos espectaculares de nuestro presidente?
Esa campaña fue la respuesta a la sugerencia de piso parejo, la renuncia al cargo y realización de debates que hizo Marcelo Ebrard. La exdelegada de Tlalpan no se negó a debatir, pero tampoco dijo cuándo, pero se negó a dejar el cargo bajo el argumento facilón de que a ella la habían elegido.
¿Qué fue lo que más impactó de los cientos de espectaculares? El costo. Más de 30 millones de pesos.
Y si ese gasto de campaña es responsabilidad de algunos diputados de MORENA, como ellos mismos lo revelaron, deben exponer facturas y transferencias para el pago de la espectacular e inútil campaña. Porque no se cumplió aquella máxima en la que se recomienda que se hable de ti, aunque sea mal. A Sheinbaum se le revirtió su estrategia, pues hoy es vista como alguien que no compite limpio.
Un dato más que desquició a los seguidores de la gobernante de la CDMX: el presupuesto, 753 millones de pesos para publicidad de su imagen, cuando en sus cuatro años de gobierno hay un subejercicio de 777 millones de pesos en el mantenimiento del Metro de la Ciudad de México. (Datos de @Juan_OrtizMX, síganlo si les interesan los números de las políticas publicas y cuestiones legislativas)
Ahí encontramos algunas de las respuestas del desplome de la Línea 12 del Metro, el subejercicio en materia de mantenimiento. Tenían el dinero para evitar la tragedia del 3 de mayo de 2021, pero la desgracia ocurrió.
Y el tema del Metro, de la Línea 12 en particular, descompone a quienes quieren que a toda costa sea Sheinbaum candidata a la presidencia.
Vendrán más ataques. Continuará el acoso. Intensificarán las “advertencias” y encaminarán sus baterías denostándome a mí y también a mi familia, pero no a los contenidos de Línea Dorada, los lobos al acecho. ¿Quién ordenó cerrarla? ni a ¿Quién quitó los pernos? El desplome de la Línea 12 del Metro. No pueden.
La Letrina. Este será un año de emociones fuertes. Dos elecciones de gobernador -Estado de México y Coahuila- que mantendrán el clima político crispado, pero estará mucho más caliente por el proceso interno de MORENA para elegir a quién abanderará al movimiento en el 2024. Acá vamos a estar.
