El año 2020 está marcado como emblema de un cambio de paradigma a nivel mundial. Todo se ha movido, todo sigue moviéndose… La única certidumbre parece ser ese cambio permanente que nos envuelve y sacude nuestra persona, nuestro entorno familiar, el entorno nacional; el entorno mundial. Surgen muchas interrogantes ante ese futuro incierto. De repente, cuando la presión va en aumento, voy a buscar un libro y descubro en el librero un cuaderno de rayas, pasta dura, donde mi madre escribió un mensaje fechado en 1993: “En esta esperanza en que vivo, quiero morir… en eso que alguna vez alguien llamó el recurso renovable de la esperanza”. Mis ojos llegan a las últimas palabras y sonrío. Mi madre murió en enero de 2016. La libreta quedó como una cápsula del tiempo. Estuvo esperando pacientemente a que llegara su momento, y llegó, para recordarme… para recordarnos que es importante vivir con esperanza.
Cerré el cuaderno y me fui a dormir con aquellas palabras clavadas en la mente. Hay que vivir con esperanza, me repetía constantemente pero ¿cómo y dónde encontrarla?
Me llené de preguntas en mi sueño y a la mañana siguiente recordé que no hacía mucho había escuchado a la talentosa directora de orquesta mexicana, Alondra de la Parra decirle a Joaquín López Dóriga en una entrevista: ¿Y si dejamos de pensar en lo que NO podemos hacer por la pandemia y comenzamos a pensar en lo que SÍ podemos hacer? Pensé entonces que quizás en esas palabras pudiera estar la respuesta anhelada al mensaje sobre la necesidad de mantener viva la esperanza.
Alondra narraba a Joaquín la historia de cómo se gestó un proyecto que logró involucrar a 30 de los músicos más talentosos del mundo que donaron su tiempo y su trabajo para apoyar a organizaciones que harán llegar la ayuda a niños y mujeres en México.
La belleza del proyecto de la Orquesta Imposible no es solamente estética, sino que tiene también una belleza profundamente humana. Nos habla de los aprendizajes que ha dejado la pandemia; de la necesidad de sabernos adaptar a un nuevo entorno con múltiples desafíos; nos habla también de nuestras posibilidades de salir adelante con aquella frase que hicieron famosa otros músicos notables: “With a little help from my friends” (con un poco de ayuda de mis amigos). Cuando Alondra terminó de hablar, Joaquín le dijo que ahora tendría que hacer otro video para contar únicamente la historia del proyecto, cuya gestación y nacimiento fueron realmente fascinantes.
Me di a la tarea de investigar más sobre La Orquesta Imposible y descubrí que Alondra ha hecho una importante labor de difusión. Quizás la entrevista más detallada fue la que concedió a El País (del 25 de agosto 2020) en la que describe paso a paso el proceso de gestación, desde que se concibió la idea hasta que se concretó.
Cuando terminé de reconstruir la historia de la Orquesta Imposible a través de mis lecturas vino a mi mente un emotivo texto de Nadine Gasman (Mujeres, indispensables en la construcción de paz, La Jornada 26 de julio, 2020) en el que habla de la importancia del liderazgo femenino para encontrar enfoques constructivos en tiempos de crisis, en tiempos de violencia y desánimo social. En ese texto Nadine nos recuerda que, aunque a veces parezcan invisibles, hay mujeres líderes cuyas manos “van entrelazando vínculos, haciendo contactos, estrechándose y que poco a poco zurcen de nuevo el tejido social”. Muchas veces he compartido reflexiones con Mauricio Meschoulam para tratar de encontrar cada vez más argumentos y sostener la idea de que “la paz no es solamente ausencia de violencia, sino una actitud ante la vida”. Muchas mentes brillantes también han destacado que el arte, la música, el ideal de armonía, también son elementos que contribuyen a la construcción de una paz positiva y verdadera.
Considero que La Orquesta Imposible es una de las historias de éxito más emblemáticas de la pandemia: la toma de conciencia individual (de Alondra) y colectiva (del compositor del Danzón número 2, Arturo Márquez, de sus amigos músicos y de algunas empresas) unidas por un reto científico (utilizar la tecnología de la manera más creativa) y un reto humano (apoyar a quienes han quedado en el desamparo no sólo por causa de la pandemia, sino por la incomprensión de otras instancias). Una de las grandes lecciones de la pandemia es que no basta con protegerte o salvarte en lo particular. Para que podamos salir adelante habremos de ayudar a otros a vencer sus miedos, vencer el egoísmo y vencer el desamparo.
Alguna vez me pregunté si podía haber alguna una mujer que encarnara el espíritu del Quijote. Creo que hay varias. Me parece que Alondra de la Parra es una de ellas. Creo que la Orquesta Imposible tiene reminiscencias del ideal quijotesco. La Orquesta Imposible es un proyecto con causa. El dinero que se recaude irá a organizaciones que ayudan a mujeres y niños de México. Ojalá pudieras regalarnos 15 minutos de tu tiempo y algún comentario.
¿Acaso tiene un emblema como el Quijote algo más que decirnos a los atribulados ciudadanos del mundo en este tan agitado año 2020? ¿Hay lugar para soñar, creer, trabajar por un mundo mejor?
Quiero seguir creyendo que el amor es capaz de triunfar sobre la muerte. ¿Me ayudan?
Listos para el 25 de Agosto?
Sigan a @impossibleorch para descubrir lo Imposible! #LaOrquestaImposible #LaMúsicaNosMueve #MusicaMaestra
Narrado por @Faitelson_ESPN pic.twitter.com/KC1D73NLld— Alondra de la Parra (@alondradlp) August 23, 2020
Regina Santiago Núñez es directora de la consultoría en comunicación política CIAM,S.C. y presidenta del observatorio ciudadano de medios OMCIM, S.C. Escribió el libro “Transición 2000: Frágil, ¡manéjese con cuidado! (UIA 2000) y “Gonzalo De Murga y Suinaga: Un Quijote en México” (Porrúa 2005). Ha colaborado en CNN en Español, el IMER, Notisistema, Radio Fórmula, Canal Once, Foro TV, La Crónica, La Razón, Excélsior, El Heraldo de México y Mujer es Más.
Estudia actualmente la maestría en Escritura Creativa en la Universidad de Salamanca.
Twitter: @regi_santiago
Facebook: Regina Santiago Núñez
Facebook: Regina Santiago Núñez e Imágenes del Poder: Don Quijote comenta las mañaneras de Andrés Manuel.