Podemos entender la palabra FINAL en dos sentidos en la actual temporada de la Liga MX, de un lado, la finalización de un campeonato que arrojará a un nuevo campeón, por el otro, el cierre de un ciclo perdedor, el final de 21 años de sequía de títulos de Liga, de burlas, de memes, de “cruzazulearla”, de la “maldición” que arropa a Cruz Azul desde hace más de dos décadas.
La Máquina tiene en sus manos el poder darle a su afición (una de las más numerosas del país) una nueva alegría, esa que muchos de sus seguidores han esperado desde que nacieron.
El escenario luce muy complicado, frente a ellos, el América. Por supuesto que se vendrá aquella final en donde en los últimos segundos las águilas empataron a los celestes y que terminarían arrebatándoles la victoria, claro que se vendrá esa nube gris en la cabeza de los jugadores que aunque no estuvieron muchos de ellos en todos estos años de derrotas, conocen la historia del club.
Tuve la oportunidad de escuchar hace muy poco tiempo a Bernardo Angulo, a quien habría que poner como parte de un tridente poderoso que tiene Cruz Azul, junto a Pedro Caixinha y Ricardo Peláez.
Bernardo es el coach mental, sí, quien realiza el famoso coaching en el plantel, quien a mi punto de vista ha hecho un gran trabajo con los jugadores y se ve en la forma de plantarse en el terreno de juego; pero sin duda, el reto llegó muy pronto y qué mejor manera que vencer a esos miedos y fantasmas, que con una verdadera revancha, en una final, y ante el acérrimo rival, aquí es donde veremos un verdadero parámetro de cómo van funcionando las cosas, aclaro, la derrota no precisamente arrojaría un diagnóstico negativo.
Del otro lado, América tiene comprobada la fórmula encabezada por Miguel Herrera, un director técnico que ya se acostumbró a ganar, a pensar que lo único que debe de hacer es conseguir la victoria, y cómo lo hace, a través de trabajo, del día a día con sus futbolistas; entendiéndolos, dándoles espacio y haciéndolos crecer. Claro que a Miguel a veces se le “van las cabras”, ya sea en la cancha o en una conferencia de prensa, pero el futbol es así, de errores y aciertos, lo mejor es reconocer lo errores y creo que Herrera lo ha hecho, y por eso es uno de los mejores técnicos mexicanos.
En la final veremos al uno contra el dos, los mejores equipos del Torneo Apertura 2018 de la Liga MX, dos clubes poderosos futbolística y económicamente, que casualmente, ahora comparten la cancha del Estadio Azteca, la cual brillará y será testigo de una final que sin duda puede ser el fin de una era maldita para Cruz Azul y el inicio de la nueva era celeste.
