Por. Patricia Betaza
Hace seis años comenzó el calvario para Natalia, desde que decidió separarse del padre de sus hijos por reiteradas formas de violencia. Con la separación vino algo peor: el martirio por evitar que la separe de sus hijos. Como muchas mujeres Natalia es víctima de violencia vicaria. Una de las formas de violencia de género que lleva a un pareja o expareja a vengarse de la madre a través de los hijos. El objetivo es simple, destruir a una mujer. ¿Le suena familiar este caso? El coraje por no perder a sus hijos llevó a Natalia Lococo a fundar en noviembre de 2021 el Frente Nacional contra la Violencia Vicaria, para tratar de visibilizarla porque en el caso de México -por desgracia- tiene un alto cobijo social. Solamente dos Estados tienen leyes para tipificar la violencia vicaria: Zacatecas y el Estado de México. Zacatecas fue pionero de incluir la violencia vicaria en la ley de acceso a las mujeres a una vida libre de violencia. Natalia Lococo narra que desde el 2016 sigue luchando porque su expareja no le quite a sus hijos a través de artilugios legales que se han traducido en pérdida de patria potestad a escondidas. Porque reconoce que el agresor llega hasta que las autoridades lo permiten. En seis meses de creación el Frente Nacional contra la Violencia Vicaria ha recibido el llamado de auxilio de al menos mil mujeres. La CNDH por su parte ha documentado 300 quejas. ¿Estás siendo violentada a través de tus hijos? Aquí el teléfono 5583788783. La violencia vicaria no solamente busca destruir física y psicológicamente o hasta económicamente a una madre. El daño para las infancias es también terrible, de acuerdo con Natalia Lococo, los hijos o hijas están bajo un estrés constante que presentan casos de ansiedad, depresión, trastornos alimenticios y hasta intentos de suicidio. Es la mujer, son sus hijos o hijas víctimas de esta violencia. Ahora se busca que haya una legislación en todo el país. Empecemos por lo pronto a hablar urgentemente de lo que es violencia vicaria.