En el Día Internacional del Libro no hay nada que me haga más feliz que hablar de ello.
Justo ayer observaba un video de mi admirado Joaquín Sabina, hablando de la lectura, de los libros, de lo que es para él en el confinamiento actual y en cualquier momento de aislamiento que se viva significa un libro.
Quien lee nunca está solo, quien tiene un libro tiene un boleto a otra vida, a otro mundo, cuantos más libros se leen más mundos, más vidas, más posibilidades de vivirse en otras realidades.
Los libros son todos en sí mismos una promesa, una ventana a un plano nuevo, abrir un libro siempre será una aventura inimaginable, porque los libros llegan a uno, te buscan y te encuentran, cada libro trae consigo una tarea personal.
Libro que sea es diferente siempre en todos los casos, a todos nos dicen cosas distintas y nunca volvemos a ser los mismos después de bebernos todas sus letras.
El libro es el veneno y la cura, la condena y la absolución, el pecado y el placer de reincidir.
Decía Jorge Luis Borges que concebía el paraíso como una librería y no hay nada más cierto, en momentos como este de contingencia y aislamiento social, que puede volverse angustioso y hostil, volteó a ver mi estante lleno de libros y esa sola imagen funciona mejor que cualquier medicina.
Cada quien su libro y su momento, y como de verdad los libros son mágicos y vienen a ti justo cuando los necesitas, yo puedo hablar de mi experiencia propia.
En esta contingencia soy de un libro especial, espero que cada quien en casa habite un libro y se permita viajar en él como en una alfombra mágica, cada libro tiene su momento, su lector y su circunstancia, al grado que hay épocas de nuestras vidas que recordamos por lo que vivimos y por el libro que estábamos leyendo en ese momento.
Libros van, libros vienen, algunos se vuelven imprescindibles otros nos dejan un buen sabor de boca, como un dulce delicioso o como una comida exótica.
Mientras tanto, felicitémonos como especie por haber sabido evolucionar y desarrollar un lenguaje, por haber tenido la paciencia infinita para que nuestra inteligencia se desarrollara al grado de aprender a poner nuestras ideas en palabras, porque ese ha sido uno de los grandes pasos de la humanidad, y sin duda el más sublime.
Carl Sagan dijo que el invento más importante de la historia de la humanidad fue la escritura, pues nos permitió transmitir el conocimiento y la cultura de generación en generación y abrir el universo.
Si observamos la evolución de la escritura, desde los primeros símbolos ideográficos plasmados con piedra y hierro en una cueva para dejar grabada una idea, al último códice cibernético que descifra los secretos del universo e intenta comunicarse con otros planes existenciales fuera de este planeta, existe en este inter todo el esfuerzo cognitivo de nuestra especie.
Salud, brindo en el día del libro por todos ellos, por sus maravillosas historias, por cada página y cada capítulo que nos ha robado la calma, quitado el sueño, empujado una lágrima, abrazado el corazón, regalado un reflejo del alma.
Gracias a todos los escritores que donaron sus palabras, a los editores que honorablemente trafican con letras y a todos aquellos que en ocasiones especiales eligen un libro como obsequio.