Hay años en los que uno se siente con el impulso de nombrar sus propósitos.
Pocas veces en mis 50 años he hecho eso que llaman Los Propósitos de Año Nuevo pero las condiciones en las que vive el país me han obligado a tomar conciencia de que si 2016 fue un año lleno de sorpresas (casi todas desagradables), es necesario blindarse para lo que viene.
Esta es una lista de lo que pretendo para los próximos 365 días:
1. Ahorrar más. Aunque lo he hecho desde que comencé mi vida laboral, ahora es apremiante hacerlo desde el primer día de 17. No más gastos superfluos, sólo adquirir lo más indispensable.
2. Usar menos el auto. El alza en las gasolinas nos harán caminar más. El transporte público no es mi opción, es caro, sucio, inseguro, incómodo, viejo.
3. Exigir a los prestadores de servicios que cumplan al 100% lo que pactamos en el contrato. Y esto es porque mientras uno cumple con el pago de las cuotas –y a veces hasta con cargos “especiales” que nuestros proveedores inventan–, ellos no brindan un servicio al 100%. Y hablo de la telefonía celular, la fija, los sistemas de TV de paga, los proveedores de internet y más. También a los gasolineros que nos dan litros de 800 mililitros, con la complacencia del gobierno.
4. Si a los del sector privado se les va a exigir, más aún será a los que brindan el servicio público. Luz, agua, sistema de drenaje; es decir, todos los servicios públicos que brindan las delegaciones y ayuntamientos. Basta ya de dar servicios a cuentagotas, al tratar de evadir su responsabilidad. En México las calles, avenidas, carreteras y autopistas están mal hechas, llenas de baches y demás son peligrosas.
5. Exigiré a las autoridades municipales, estatales, delegacionales y federales mayor seguridad para mi familia y mis vecinos. Quienes vivimos en una zona conurbada como la de la ciudad de México, padecemos las incompetencias de los gobiernos del Estado de México y de la Ciudad del mismo nombre. También la de los alcaldes y delegados de ambas entidades. No sé si su Mando Único, o Mando Mixto tenga éxito este año. No lo creo, pero como ciudadano les voy a exigir una y otra vez seguridad plena. Ya no podemos estar encerrados en nuestras casas sólo por el contubernio entre delincuentes y autoridades (a veces no sabemos quién es quién).
6. Cumpliré con todas mis obligaciones ciudadanas pero al mismo tiempo exigiré que mis derechos no sólo sean respetados. Bien lo dijo Perla Gómez en la entrevista que le hicieron en “Sin Apuntador” (http://bit.ly/2huayUP): “Derecho que no es ejercido, derecho perdido”.
7. Contribuir a mejorar el entorno en el que vivo. No sólo dejando de usar el auto o participando en campañas pro ecología, sino uniéndome con mis vecinos para generar una nueva cultura de convivencia en nuestra comunidad. Ya es mucha la violencia que vivimos, que proviene de la delincuencia organizada y la que tiene permiso para mandar (la autoridad). Mientras más juntos estemos, obligaremos que las autoridades hagan su trabajo (no mejor, no peor, tan sólo que lo hagan).
8. Votaré en junio. Y lo haré por la mejor opción. Los que vivimos en el Estado de México tenemos la oportunidad de hacer grandes cambios para dejar de ser la entidad más violenta, más poblada, en donde la corrupción es la principal característica de los gobiernos municipales, el estatal y los cacicazgos imperan. Todavía no me convence ninguna ni ninguno de los que quieren ser “Titulares del Ejecutivo Estatal”. Para ellos tengo varias preguntas que en su momento compartiré con ustedes para ver si ellas y ellos se atreven a contestar con verdad.
9. Pretendo entregar dos colaboraciones para mujeresmas.mx a la semana. Espero lograrlo.
10. Hacer un recuento el próximo de lo cumplido en estos puntos. No se los firmo porque eso ya está “quemado”.
Les deseo un año lleno de salud. Que haya trabajo y que junto a sus familias gocen lo mejor de la vida. ¡Abrazos!