Morena es el único partido político que no cumple, como lo promete a cada rato su candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador, con el derecho de admisión que establece que la persona titular de un establecimiento o evento se reserva la atribución de permitir el ingreso o permanencia en los lugares de su propiedad, siempre que la exclusión, en su caso, se fundamente en condiciones objetivas para la entrada y estadía. Con su coalición “Juntos haremos historia” regresan a la luz pública personajes como Félix Salgado Macedonio, Lino Korrodi, Elba Esther Gordillo y Alfonso Durazo, dueños de un pasado negro que jamás se olvidará.
Si bien es a criterio de los líderes políticos la inclusión o no de actores que formarán parte de sus bases militantes, también es cierto que en esta lucha por ganar el tabasqueño nos impondrá figuras relacionadas con el crimen organizado para operar electoralmente a su favor. Analicemos a cada uno de los mencionados:
Félix Salgado Macedonio fue recientemente nombrado coordinador estatal de Morena en Guerrero, con lo cual es un hecho que será el candidato de ese partido a la gubernatura del estado más violento de todo el país, sin importarle a López Obrador que fue precisamente durante la administración de Salgado cuando se inició la pelea entre cárteles de la droga por controlar el puerto de Acapulco. Los asesinatos de integrantes de una y otra banda de narcotraficantes hicieron de esa ciudad paradisiaca una bahía de sangre.
Conocido también como el “senador rebelde” por llegar a las sesiones de la cámara alta vestido todo de piel, casco y en motocicleta Harley, Félix Salgado mantuvo relaciones amistosas con Ángel Aguirre Rivero, exgobernador de Guerrero y responsable directo de la desaparición de los 43 estudiantes de la Escuela Rural de Ayotzinapa, de los que no se sabe con exactitud si están vivos o muertos ni su paradero. Ambos guerrerenses fueron apoyados por el tabasqueño a su paso como líder del PRD.
Lino Korrodi tiene sus raíces en la vieja amistad que sostuvo con el expresidente, enemigo acérrimo del candidato presidencial de Morena, Vicente Fox, siendo la cabeza que dio origen al cártel de “Los Amigos de Fox”, un grupo de acaudalados empresarios regiomontanos unidos en 2000 para reunir dinero no lícito durante la campaña del guanajuatense a la Presidencia de México. Korrodi en ese entonces definía a López Obrador como uno expriísta resentido y ambicioso.
Diez años después, este singular personaje venido a menos se subió al arca de AMLO para afirmar que es el único aspirante que podría obrar un milagro para acabar con el sistema corrupto del PRI que encabeza el mexiquense Enrique Peña Nieto.
Elba Esther Gordillo, la otrora poderosa lideresa del SNTE, significaba para López Obrador la fiel representación del mal en este mundo al ser una de las operadoras principales a nivel nacional para que él no accediera a la Presidencia de la República. En pleno zócalo de la Ciudad de México, durante una de las asambleas informativas que llevaron a la toma de Paseo de la Reforma, el tabasqueño dio a conocer un audio en el cual la maestra negociaba con gobernadores el voto a favor de Felipe Calderón.
Gordillo era, en voz del tres veces candidato presidencial, la única mujer que jamás sería admitida en su rebaño. Ahora no sólo es miembro del clan lopezobradorista, es también una víctima de Enrique Peña Nieto y operadora de Andrés Manuel López Obrador a través de su yerno Fernando González Sánchez.
Alfonso Durazo trae en sus venas los colores del PRI, el PAN, el PRD y ahora el de Morena, ideología camaleónica que no se le podría cuestionar dado el mimetismo de su candidato presidencial, quien, sólo con excepción del PAN, ha militado en los otros tres partidos políticos. El sonorense fue una estrella fugaz como secretario particular de Luis Donaldo Colosio, luego ocupó el mismo cargo con Vicente Fox y como perredista fue diputado federal, aunque se le recuerda, principalmente, por haber recibido una fuerte cantidad de dinero proveniente del crimen organizado.
Con este perfil, Durazo es candidato de López Obrador para revivir la Secretaría de Seguridad Pública federal en caso de que ganara las elecciones del 1 de julio, quien daría amnistía a narcos. El derecho de admisión se ha quedado sólo en palabrería. En Morena saben que sólo Carlos Salinas de Gortari y Vicente Fox no tienen, en este momento, posibilidad alguna de ser admitidos… a menos que se arrepientan de sus pecados.
Elena Chávez. Estudió periodismo en la universidad Carlos Septién García. Ha escrito los libros “Ángeles Abandonados” y “Elisa, el diagnóstico final”. Reportera en diversos diarios como Excélsior, Ovaciones, UnomásUno; cubrió diferentes fuentes de información. Servidora Pública en el Gobierno del Distrito Federal y Diputada Constituyente externa por el PRD.
