Por. Fernando Coca
En los últimos días, dos prominentes miembros de la clase política han cometido violencia política en razón de género.
Los ataques de estos dos personajes se han dirigido a la candidata Claudia Sheinbaum de MORENA, PT, Partido Verde y de la también candidata Xóchilt Gálvez, de la alianza PAN, PRI y PRD.
A Sheinbaum se le quiso descalificar llamándola judía queriendo descalificarla por ello. El agresor fue Vicente Fox, expresidente de México. No es la primera ocasión que Fox ataca a una mujer por el simple hecho de serlo. Sus actitudes machistas fueron bien conocidas durante su sexenio.
Cuando Epigmenio Ibarra llamó esperpento a Xóchilt Gálvez en el programa de Ciro Gómez Leyva en Radio Fórmula también se atrevió a comparar a la senadora con licencia con los agentes de los servicios secretos del régimen nazi en Alemania, luego de que, en un evento de campaña, Gálvez “firmó” con sangre su compromiso de no retirar los programas sociales impulsados por el presidente López Obrador.
Tanto Fox como Ibarra no han medido sus palabras en los nuevos tiempos que corren en donde las mujeres están rompiendo barreras para que sus derechos sean garantizados. En la política mexicana, las mujeres que se han atrevido a contender por la Presidencia se les ha atacado quizá de forma mas cruel que a cualquier candidato.
La violencia por su género la han padecido Rosario Ibarra, Marcela Lombardo, Cecilia Soto, Josefina Vázquez Mota, Margarita Zavala y Patricia Mercado cuando fueron candidatas, y hoy, son victimas de ello Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez, con la diferencia que en esta ocasión alguna de ellas será la primera presidenta de México.
Propagandistas exacerbados, Ibarra y Fox no se contienen en su verborrea con tal de apoyar a quien ellos quieren ver en la Presidencia. Ambos son merecedores de sanciones por ejercer la violencia en contra de las candidatas que, si bien como exfuncionarias públicas podrán ser criticadas en su actuación en el ejercicio de encargo, Epigmenio y Vicente no han entendido que sus dichos generan violencia, estigmatizan y rompen la civilidad que debiera ser la regla y no la excepción en este proceso electoral.
En nada le ayuda Fox a Xóchilt ni Epigmenio a Claudia. Ellos hacen campaña negra y sucia que los degrada. Creen que mientras más brutal, salvaje, agresiva y feroz sea su descalificación, ellas ganan votos.
Ni Vicente Fox ni Epigmenio Ibarra han entendido que los tiempos que corren no son los del machismo que arrasaba con las que se ponían enfrente. Esos dos hacen campaña con violencia y ya están caducos.