- Emmanuel y Mijares: Tour Amigos 10 años.
Por. Gilda Melgar
Para Ivonne y Adriana
Agosto de 1987. Estoy a unos meses de entrar -por fin- a “mi” carrera después de un “año sabático” y otro más en la carrera equivocada. Tirada en el sofá, las tardes se me van entre la lectura y la música. En la radio de pronto suena la canción del momento. Me levantó de un salto y bailo como loca “Me gusta oír tus pasos, en zapatos de tacón, subir corriendo la escalera cuando vuelves a las 2… Bella, transparente bella, endiabladamente bella, no se asoman las estrellas ni la luna”… Qué voz la de ese tal Mijares. El locutor dice que antes de “Bella”, Manuelito cantaba en bares y era corista de Emmanuel, ése que tanto le gusta a mi hermana y que este año también tiene el hit parade a “Es mi mujer”.
El video de “Bella”, con la rubia piernas largas “subiendo la escalera”, catapulta a Mijares como la promesa del año y de toda una generación.
Los años pasan, corren, vuelan. Mi vida transcurre siempre aderezada por los éxitos de esos dos amigos guapos, talentosos, elegantes y carismáticos que, justo hace 10 años, tuvieron la brillante idea de juntar su legado y ofrendarlo a través de un concierto anual a todos los que, como yo, nos enamoramos y desilusionamos entonando sus canciones.
Agosto de 2023, el mes de mi cumple. De pronto, escucho por radio el anuncio sobre el “Tour Amigos 10 años” de Emmanuel y Mijares. Algo me dice que ése sería un auto regalo perfecto. En la recta final de mis 50 ya he “cumplido” con todo el deber ser de mi generación. Ahora puedo dejarme llevar y repasar mi vida con el corazón en la mano, cantando y bailando con ellos. Sí, hoy quiero celebrar su legado en la música en Hispanoamérica y el mío, acompañada de los que me quieren.
10 de agosto. Cual adolescente al encuentro de BTS, voy con el corazón agitado a mi cita con Emmanuel y Mijares. Después de mil vueltas buscando la puerta a mi butaca, por fin me siento llego a mi fila.
Se apagan las luces y desde el escenario inicia un hermoso juego de luces mientras los músicos tocan la intro de “Bella Señora”. El telón sube y ellos aparecen con sus trajes brillantes y su carisma descomunal. El auditorio -a todo lo que da- enloquece y de pie todos cantamos:
“Háblame de ti, bella señora
Háblame de ti sinceramente
Llévame contigo a tu misterio
Llévame contigo a tu apartamento
A tu apartamento…”
Las pantallas laterales hacen un zum de mi amado Mijares y casi muero cuando un giro de la orquesta nos lleva a “Bella, transparentemente bella…”. La pareja treintañera, a mi lado, enloquece y recuerdo a mi amado hijo que a sus 19 años, también la canta felizmente .
Tras esa entrada triunfal, Mijares y su coro nos regalan otro de los mejores momentos de la noche gracias a su versión acústica de “Nube azul”. Se me enchina la piel y confirmo que no pude tener mejor cumpleaños.
La apoteosis llega cuando Emmanuel, enfundado en un traje celeste satinado, a sus 68 años y con la voz aún aterciopelada canta:
“No, no, no importa
Si tú
Me miras yo me convierto en un rey azul
Me hice una promesa hace unos días
Para tocar tu mano y no me atrevo todavía”.
— Emmanuel (@EmmanuelOficial) August 11, 2023
Imagino la felicidad de mi hermana, unas filas atrás, escuchando y bailando su canción favorita. En mi fila ya todos somos amigos, sólo falta tomarnos de la mano y balancearnos juntos.
Nos es secreto que soy más fan de Manuel y es por lo que cuando vuelve al escenario con “No se murió el amor” se me quita la vergüenza y lloro, pensando que, entre él y yo, con más de 30 años juntos:
“No se murió el amor
Muy al contrario sigue avivando el deseo a diario
Sin descansar jamás, sin desfallecer
Ninguno de los dos
Somos perfectos
Tenemos vicios
Hacemos trampas
Mentimos porque sí
Por vanidad…”
Por supuesto que verlos cantar a dúo era uno de lo más momentos más esperados de la noche. Me atrevo a decir que el mano a mano de “Tengo mucho que aprender de ti”, “No hace falta decir” y “Tú y yo” fue el punto culminante de su concierto No. 64. Su dominio escénico, sus voces, su elegancia y sus sonrisas de fábula sellaron con oro una década de trabajo arduo, aplausos y reconocimientos.
Sin duda, mis performances favoritos fueron “Soldado del amor” con Mijares vestido de militar y “El día que puedas” cuando Emmanuel nos pidió prender el celular. Miles de luciérnagas, llenas de felicidad, coreamos: “Las cosas comunes las tiras al aire, que no vuelvan nunca, que no duelan más”.
Los fanáticos nos sabemos todas las canciones de este dúo, pero también hemos hecho nuestros los capítulos más importantes de su vida privada. Por eso el auditorio enteró enloqueció cuando Mijares dijo que iba a cantar una que “no debía” mientras se llevaba la mano a la boca haciendo un gesto de mordaza. “Sí me tenías” fue coreada por todos los que odiamos a la ex de Manuelito y lo abrazamos al gritar “Un día entenderás que fue un error cambiar la realidad por fantasía”.
El aniversario 10 de Mijares y Emmanuel me ofreció el regalo más emotivo de cumpleaños. Con Lucero Mijares en la primera fila, acompañada de todo el elenco del musical “Mago de Oz”, su padre anuncia que la que sigue es para ella, su niña.
“Di lo que piensas
Has lo que sientas
Da lo que tengas
Y no te arrepientas
No te limites
Por lo que digan
Sé lo que quieras
Pero sé tú mismo
Pero sobre todas las cosas
Nunca te olvides de Dios
Pero sobre todas las cosas
Como te quiero mi amor.”
Pienso en mi propia niña ahora en otro país y lloro al pensar en sus rizos y en su amor. Qué coraje no haber alcanzado boletos juntas, mi hermana, mi amiga y yo.
Me consuelo sabiendo que todas tenemos el privilegio de amarnos y, como Emmanuel y Mijares, de estar juntas y ser cómplices de vida por más de 30 años .