Por. Gilda Melgar
Sue Yun, mejor conocida como “Hamimommy” es una youtuber surcoreana de estilo de vida que, a sus treinta y pico de años, cuenta con más de 2 millones de seguidores a los que cautiva cada semana con videos que pueden verse subtitulados en cualquier idioma.
“Hami mamá” se asume como una ama de casa “común y corriente”, sin embargo, lo que sus entregas reflejan acerca de su vida cotidiana, labor doméstica y preparación de comida casera, dista mucho de lo común. De hecho, su casa, su cocina y el hermoso jardín, parecen el set de un comercial sobre las mejores marcas de electrodomésticos y alimentos, dentro y fuera de Corea.
Lleva apenas dos años compartiendo videos acerca de su día a día como ama de casa, esposa y madre de una niña en preescolar, actualmente la señora Sue factura con firmas europeas como IKEA, Singer y Smeg, además de un sinfín de firmas coreanas de alta gama.
En su rutina diaria -desde las 5 am y hasta antes de irse a la cama- Hami despliega sus talentos haciendo uso de toda clase de muebles, artefactos y alimentos sustentables, ecológicos y orgánicos, hechos a partir de materiales o fibras naturales. Jamás asomará en uno de sus videos un artículo de plástico ni por equivocación.
https://www.youtube.com/watch?v=Ja5o5F8HUNw
Además de mostrar los platillos que cocina a diario con destreza y aparente facilidad, Sue comparte trucos de orden, limpieza y jardinería con más gracia que la mismísima Mari Kondo.
Al parecer, la pandemia fue el catalizador que la llevó a la cima, no sólo porque durante el encierro el mundo privilegiado se volcó a cocinar o a decorar su casa bajo la “tutoría” de youtubers como ella, sino también porque gracias al confinamiento se revalorizó la importancia y carga que conlleva el trabajo doméstico, al grado de romantizarlo, justo como ella lo hace.
Según lo que la misma bloguera ha narrado, empezó con el canal a raíz de su permiso sabático por maternidad y, aunque parezca increíble, antes de convertirse en madre, esta “ama de casa” trabajó en alianzas y operaciones de “Korean air”, pues está graduada en lenguas extranjeras. En varios episodios rememora la época en que a menudo viajaba a París, de donde siempre traía a casa las mejores mermeladas para rebozar sus tostadas matutinas.
Su propuesta forma parte de la corriente de los “blogs silenciosos” que inició justamente en Corea dada la costumbre oriental de salvaguardar la privacidad y ocultar el ego. La particularidad de las “silent blogers” es que no dejan ver su rostro ni escuchar su voz poniendo, así todo el foco de su trabajo en la estética visual y la nitidez del audio.
De hecho, parte de su éxito se debe al uso del ASMR (respuesta sensorial provocada por algunos sonidos), como el ruido de un cuchillo que corta pimientos, el goteo del primer café del día que pasa por un filtro de cobre, el chisporrotear de un aceite de ajonjolí, las burbujas de un agua hirviendo a punto de recibir una pasta artesanal, etc.
Al Igual que ella, otras famosas blogeras asiáticas de estilo de vida y cocina como “Honeyjubu“, “Hidamarycooking”, “Maison Oliva” comparten su experiencia, silenciosa y bella, bajo un aura de perfección y calma. Personalmente soy fan de Hida Mary, una japonesa de la cual sólo podemos apreciar sus mandiles cien por ciento lino y, claro, sus hábiles manos de repostera.
Por supuesto que estas mujeres privilegiadas han sido criticadas por otras mujeres, sociólogas o feministas, debido a que su propuesta refuerza el estereotipo patriarcal de madres y amas de casa abnegadas y diligentes. Y yo no podría estar más de acuerdo con ello, especialmente cuando “Honeyjubu” se levanta a las 5 de la mañana para preparar la “lonchera” de su esposo. Claro que la dichosa lonchera es una hermosa caja de madera cuya comida sería algo así como un Obento del Suntory: arroz al vapor, rollos de huevo, salmón glaseado y tomatitos Cherry.
Cuando su esposo se va a trabajar, ella continúa con el desayuno de sus hijos y cuando estos se van a la escuela, comienza su jornada de orden y limpieza de las habitaciones para luego regar todas sus plantas, sacar al perro a pasear y retornar para preparar la comida más importante del día, una cena que parece un banquete de temporada como los de este verano que incluyen trozos de sandía fresca cortada a la perfección o unos hermosos duraznos al grill con queso ricotta.
Volviendo a Sue, intuyo que ella sabe bien que además de contar con 2 millones de fans que le aplauden y validan con mucho ruido, también cuenta con detractoras que la critican por ocultar no sólo su rostro sino el verdadero trabajo pesado y desgastante detrás de una casa pulcra y una mesa fina. Sólo que ella, gracias a su previa experiencia como estratega de negocios, monetiza sus videos con grandes firmas transnacionales y quizás por eso mismo, se excusa comentando que desde que llegó a los 100 mil seguidores hace donativos con causa en beneficio de otras mujeres y niños de su país. Y cada tanto les envía indirectas disfrazadas de frases inspiracionales como esta “Donde quiera que estés, hagas lo que hagas, encuentra la manera de ser feliz”.