Ucrania está dispuesta a renunciar al ingreso a cualquier alianza militar, incluida la OTAN, si a cambio recibe por escrito garantías de seguridad de diez países, anunció en Estambul la delegación de Ucrania tras una ronda de negociaciones con Rusia.
“Queremos un mecanismo internacional que funcione, similar al artículo 5 de la OTAN”, manifestó el jefe de la delegación ucraniana, David Arahamiya, en declaraciones a la prensa.
“Nos gustaría que los países garantes fueran los del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (Reino Unido, China, Rusia, Estados Unidos y Francia), así como Turquía, Alemania, Canadá, Polonia e Israel“, detalló el parlamentario.
En caso de un ataque o agresión contra Ucrania, Kiev podría exigir consultas en tres días y, si no se resolviera el asunto por vía diplomática, tendría derecho a asistencia militar, incluida la declaración de una zona de exclusión aérea, describió Arahamiye sobre el acuerdo propuesto por su delegación.
Si se dan estas garantías, “Ucrania aceptará ser neutral, no tendrá armas nucleares, ni permitirá bases militares extranjeras en su territorio”, agregó otro miembro de la delegación ucraniana, Oleksander Chalyi.
Por otra parte, el negociador Mikhailo Podolyak apuntó que este acuerdo no cubriría “los territorios temporalmente ocupados” por Rusia de las autodeclaradas Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, ni la península de Crimea, que Rusia anexionó de forma ilegal en 2014.
En todo caso, la propuesta “no prevé que Ucrania utilice la fuerza para liberar estos territorios”, subrayó el representante ucraniano.
El estatus de estos territorios se deberá negociar con Rusia aparte durante un plazo de 15 años.
Por otra parte, Chalyi destacó que el acuerdo no excluirá en ningún caso que Ucrania ingrese en la Unión Europea sino que, al contrario, los países garantes apoyarán activamente una adhesión.
Si hubiera un acuerdo definitivo, su contenido deberá ser aprobado en referéndum por el pueblo de Ucrania, una vez que todas las tropas rusas hayan abandonado el territorio, ya que un acuerdo firmado bajo presión sería inválido, señaló la delegación ucraniana.
EFE