Por. Sandra Vivanco
El Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) es una tarea del Instituto Nacional Electoral, que inicia por lo menos seis meses antes del día de la jornada electoral, y que consiste en un sistema que provee, como su nombre lo dice, de resultados preliminares al anuncio oficial, pero no se trata de un ejercicio que derive de las encuestas de salida que se practican el día de las votaciones, y se lleva a cabo por medio de la captura de los datos contenidos en las actas de escrutinio y cómputo de cada casilla y su debida publicación.
Pero eso no es un trabajo sencillo, se requiere de muchas herramientas tecnológicas para que, en cuanto los paquetes electorales empiecen a llegar el personal debidamente capacitado durante meses, tenga las habilidades para recibir los paquetes, resolver incidencias como que las actas no vayan visibles o no sean legibles, se puedan anotar los datos pertinentes y se publiciten.
Es decir, ese programa que funciona en tiempo real a través del internet, y que puede ser susceptible de errores humanos en el embalaje del paquete electoral una vez concluido el escrutinio y cómputo en casilla, requiere de una debida capacitación y evaluación previa, de ahí que existan tres simulacros que se distribuyen en los aproximadamente seis meses, con la finalidad de saber que el día D, el personal reaccione y el sistema funcione.
Al tratarse de un simulacro los datos son ficticios, por tanto, no se trata de números que denoten alguna tendencia, mucho menos que sean un reflejo estadístico de otros ejercicios electorales.
De los simulacros que se realizan como cumplimiento a las normas electorales, lo único que debe de resaltarse es la funcionalidad de los Centros de Acopio y Transmisión de Datos (CATD), que se ubican en los Consejos Distritales del INE, y que el día 6 de junio, brindarán datos de la jornada electoral oportunamente, pero en cumplimiento a principios rectores como la certeza y la máxima publicidad.
Es importante resaltar que no se trata de un cómputo en sí, sino que solo es un reflejo de lo asentado en las actas de escrutinio y cómputo, es decir, las personas que trabajarán una vez cerradas las casillas, en espera de los paquetes electorales, no contarán los votos, los paquetes serán resguardados después de obtener el acta que debe ir pegada por fuera del mismo, por tanto, si las personas funcionarias de casilla, se equivocaran y no lo dejaran a la vista o lo incluyeran con todos los documentos y materiales electorales, significará que esa acta y esa casilla no será parte del PREP.
El ejercicio del PREP, está ya muy probado por el ahora INE, cuando aún se llamaba IFE, se estableció un sistema de información de resultados electorales preliminares (SIRE), antes la difusión a oficinas centrales fue vía fax, en 1991, fue un ejercicio que capturó aproximadamente un 70% de los datos de las casillas. Se conoció como PREP, en la siguiente elección Presidencial, y desde entonces no ha dejado de funcionar, se ha mejorado considerablemente, porque en ese año los datos al Consejo General se transmitieron por teléfono, se computaron entonces poco más del 90% de actas durante cuatro días (96 horas desde su inicio).
Y así sucesivamente ha ido mejorando tanto tecnológicamente como en la precisión de datos, pero además esto último incluye la importancia de la capacitación a las personas funcionarias de casilla, para que, en el momento de adjuntar el acta para el PREP, la dejen por fuera del paquete electoral, debemos considerar que quienes fungen como funcionarios son ciudadanos y ciudadanas que se dedican a diversas actividades, por lo que no son expertos en elecciones, además del cansancio de una jornada que inicia desde las siete de la mañana, puede ocasionar un error como no dejar visible el acta, sin embargo, ello ha estado superado por el gran compromiso de la ciudadanía que ese día se convierte en la máxima autoridad electoral.
La existencia del PREP, garantiza, por un lado, la credibilidad en las instituciones electorales, porque los datos provienen de la propia ciudadanía que estuvo en la casilla realizando la mayor responsabilidad de un proceso electoral: recibir los votos, contarlos y asentarlos.
Pero aunado a lo anterior, dota de seguridad y transparencia, de lo que pasó en cada casilla, esa acta que es el insumo fundamental del PREP, lleva de puño y letra la fotografía de lo que sucedió en esa mesa receptora, con la presencia de los representantes de los partidos políticos, coaliciones y candidaturas sin partido, por lo que, la confianza depositada es la ciudadanía no en funcionarios o servidores públicos.
Evidentemente el origen del PREP obedece a los antecedentes de la posibilidad de que quienes estaban a cargo de la organización de las elecciones, inclusive antes del IFE, cometieran fraude, porque los votos se contaban hasta que iniciaban los cómputos, en los respectivos Consejos Distritales, el miércoles siguiente al domingo de la elección, ahora antes de que inicien los mismos, se cuenta con los datos de este instrumento, y a las horas de cerradas las casillas se conocen datos certeros y no tendencias.
Este fin de semana concluyó el último simulacro del PREP, por lo que, todo está listo para que este mecanismo dotado de seguridad informática sea un instrumento que nos permita conocer los resultados electorales antes de media noche el próximo 6 de junio.
No olviden salir a votar el próximo domingo, es una obligación y un derecho.