Por. Paloma Cuevas
A Toñito, de apenas nueve años, le fue arrebatada la vida en San Pedro Zictepec, municipio de Tenango del Valle, Estado de México. El homicida, Mario “N” de 30 años de edad, era el encargado del lugar en donde Toñito iba a jugar videojuegos; en dicho inmueble, el menor fue hallado sin vida en un depósito de agua.
“Toñito, siento tanto y siento mucho que haya sido así; siento aún más que haya gente tan equivocada como para creer que tienen el derecho a lastimar, a privar de la libertad y de la vida a cualquier otro ser humano; que piensen que pueden tocar, maltratar y arrancar los sueños de un niño, así chiquito como tú, como si fueran por la vida arrancando flores…”