A las 23:01, tiempo de México (00:01 de Estados Unidos), entraron en vigor los aranceles del 25 por ciento a México y Canadá, impuestos por el presidente Donald Trump.
A pesar de las negociaciones que sostuvo con el gobierno mexicano en materia de seguridad y comercio, Trump consideró que México no “abordó adecuadamente” el combate al tráfico de fentanilo.
El presidente Trump “está procediendo a aplicar aranceles a Canadá y México en virtud de la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional (IEEPA, por sus siglas en inglés) para combatir la extraordinaria amenaza a la seguridad nacional de Estados Unidos, incluida nuestra salud pública, que representa el tráfico de drogas sin control”.
“Aunque el presidente Trump dio tanto a Canadá como a México amplias oportunidades para frenar la peligrosa actividad de los cárteles y la afluencia de drogas letales que fluyen hacia nuestro país, no han abordado adecuadamente la situación”, informó la Casa Blanca en un comunicado.
El documento publicado acusa que “las organizaciones mexicanas de narcotráfico, principales traficantes de fentanilo del mundo, operan sin obstáculos debido a una relación intolerable con el gobierno de México.
“El gobierno de México ha proporcionado refugios seguros a los cárteles para que se dediquen a la fabricación y el transporte de narcóticos peligrosos, que en conjunto han provocado la muerte por sobredosis de cientos de miles de víctimas estadounidenses”.
Asimismo, la Casa Blanca señala que los cárteles de la droga mexicanos son conocidos por su extrema brutalidad, corrupción y control sobre regiones enteras de México.
De igual manera, asegura que el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación “fabrican fentanilo en laboratorios clandestinos que operan en México, en forma de pastillas falsas, y lo trafican a Estados Unidos a través de los numerosos puntos de entrada que controlan. El 97% de las incautaciones ocurren en la frontera entre Estados Unidos y México”.
El documento también exalta los niveles de violencia con los que operan los cárteles mexicanos, a los cuales hace unos días los declaró como grupos terroristas.
“La violencia de los cárteles, incluidos los drones armados y los artefactos explosivos improvisados en las carreteras, se está acercando cada vez más a la frontera entre Estados Unidos y México a medida que los cárteles se atacan más activamente entre sí, así como al personal militar y policial mexicano.
“Esta alianza con el gobierno mexicano pone en peligro la seguridad nacional de Estados Unidos y debemos erradicar la influencia de estos peligrosos cárteles”, aseveró.
Explica que “un estudio reciente ha reconocido el aumento de la producción nacional de fentanilo en Canadá y su creciente presencia en la distribución internacional de estupefacientes”.
Según el documento, “las incautaciones de fentanilo en la frontera norte del año pasado, aunque menores que las de México, podrían matar a 9.5 millones de estadounidenses debido a la potencia de la droga”, prueba del creciente papel de Canadá en esta crisis. “Las incautaciones de fentanilo en la frontera norte en los primeros cuatro meses de este año fiscal se están acercando rápidamente a lo incautado en todo el año fiscal 2022”.
El comunicado afirma que “el hecho de que ambos países no detengan a los traficantes, no incauten la droga ni se coordinen con las fuerzas de seguridad estadounidenses constituye una amenaza inusual y extraordinaria para la seguridad de Estados Unidos, que exige la intervención de la IEEPA para obligar a rendir cuentas y proteger las vidas de los estadounidenses”.