Los casos de COVID-19 experimentaron un aumento del 80 por ciento en las últimas cuatro semanas (del 10 de julio al 6 de agosto), debido principalmente a la oleada de contagios en Corea del Sur, según el último informe de situación de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Mientras en el resto de las regiones los casos siguen cayendo, en ocasiones debido a que muchas redes sanitarias han dejado de notificar los contagios (un 46 por ciento menos en Europa y un 42 por ciento en América), en Asia Pacífico los casos crecieron 137 por ciento en el periodo estudiado, principalmente debido a la situación surcoreana.
En cifras absolutas, los positivos en las últimas cuatro semanas ascendieron a casi 1.5 millones, de los que 1.35 millones se reportaron en Asia-Pacífico, la mayoría de ellos (1.27 millones) en territorio surcoreano, de lejos el país con más incidencia, al menos reportada oficialmente a la OMS.