Por. Paloma Cuevas R.
Escribo este texto mientras escucho la lluvia caer con la ventana abierta.
Escribo este texto y pienso en las ganas que tengo de tomarme un mezcal y pienso también que no puedo hacerlo. “Estoy tomando antibiótico”, me digo, mientras no me sorprendo de estar hablando conmigo misma, yo me pregunto y yo me respondo.
Así es la vida conmigo, me escucho, y me conozco, poco a poco cada vez más.
Ahora pienso, mientras bebo en ese café aguado como pócima de calcetín: “es tremenda la gente, sí la gente y su manera de relacionarse con los otros, en muchas ocasiones pareciera que lo hacen de manera premeditada y la meta es lograr que los otros requieran su aprobación de manera urgente, en todos los ámbitos de la existencia de los demás, incluyendo la creación de su propia imagen de sí, de su construcción y su prestigio, si no me creen visiten la principales redes sociales, donde algunos se paran de cabeza por un like.
Mientras la lluvia sigue cayendo, yo me acomodo un poco mejor frente a la máquina y escribo, creo, imagino fantasías, en el ambiente la música, el sonido del teclado y la necesidad de entender.
¿En qué momento surge la necesidad de cumplirle a los otros?
¿En qué momento nos arrancamos la posibilidad de vivir nuestra vida y la ponemos en el mostrador de una sociedad que sin conocernos nos juzga?
¿Por qué permitimos que su obsesión por medirnos el ritmo, por decirnos a qué velocidad y con qué metas debemos existir y en qué momento tenemos que cumplirlas, nos arranque el gozo de estar aquí y ahora?
¿Cuándo autorizamos competir con los otros y para qué lo hacemos?
No existe acción más mediocre para mí que competir con quien por default es considerado “mejor” que uno mismo, porque es evidente que no hay nada que hacer ahí, pero competir con alguien “menos favorecido” o “con menos posibilidades de ganarnos” se me hace igualmente mediocre, si la competencia la tenemos ganada desde el inicio, dirían mis hijos: “pues, ¿cuál es el chiste?”.
Siempre he creído que la única competencia válida es la que asumimos con nosotros mismos en el día a día y con la intención de mejorar, de ser una persona que pueda mirarse a los ojos y sentirse orgullosa de sus acciones.
Deseo de todo corazón que todxs aquellxs que lean esto se sientan plenamente amados, respetados y sin la urgencia de ponerse para que les aplaudan.
El llamado es esta semana a la observación de nuestras acciones, al reconocimiento de todas esas áreas en las que parece que nos conformamos, a preguntarnos si realmente esta es la vida que decidimos para nosotros o si “alguien” – los otros – nos la está dictando con apuntador.
Mientras pensaba en qué compartiría con ustedes me encontré el poema de Gloria Fuertes que les dejaré por aquí para irme despacito y dejarlos cultivarse, dejarlos e invitarlos a hacer lo que les dé la gana, – respirar por ejemplo, amar porque nos nace, besar porque es sabroso, deleitarnos en la gastronomía porque es rico, y vivir, porque es muy triste saber que la única sentencia verdadera de nuestra existencia, es la muerte y que habrá quienes partan sin haber gozado del viaje.
Los invito a permitir que les crezcan amapolas, orquídeas o margaritas, sean un jardín, o lo que les venga en gana, ¡el cielo es el límite!
Me dijeron:
—O te subes al carro
o tendrás que empujarlo.
Ni me subí ni lo empujé.
Me senté en la cuneta
y alrededor de mí,
a su debido tiempo,
brotaron las amapolas.
GLORIA FUERTES
Paloma Cuevas R.: Mujer y madre. Femenina cuando le da la gana. Amante declarada de México, el mezcal, el buen café y la verdad sin anestesia. Humanista, sapiosexual, docente durante más de 22 años, filósofa, columnista, escritora y locutora en temas de Cultura, Política y Erotismo. Fundadora de #ProyectoÍtaca plataforma política y cultural. Locutora titular de #ProyectoÍtaca en Cadena Radio Mx. Promotora y gestora cultural incansable. Presidenta de la Academia para el estudio y difusión de la obra de Dolores Castro, por la Ilustre y Benemérita Sociedad de Geografía y Estadística del Estado de México. Asesora del Consejo Ciudadano de Historia, Cultura e Identidad Mexiquense SOMEGEM. Antologada en más de 50 títulos a nivel internacional. Ha publicado la plaquette de poesía “De amputaciones necesarias” y el poemario “Mujer en voz alta”. Condecorada en 2020 con la Medalla y el Pergamino Leona Vicario. Secretaria Nacional de Cultura México para la Red Internacional de Mujeres Líderes en Acción (RIMLA Internacional). Integrante del Mapa Nacional de Escritoras Mexicanas Contemporáneas. Directora Mundial de Comunicación y Relaciones Públicas del World Poetry Fest, hasta 2020. Embajadora Estado de México de Fridas de Barcelona. Embajadora de la Red Naranja del Estado de México. Escudo de Plata 2021, para la UHE-PORTUGAL /Unión Hispano Mundial de Escritores, por México.
