Por. José Luis Hernández
Hace 501 años que nacieron las carnitas de puerco, así lo narró Bernal Díaz del Castillo en su Historia verdadera de la conquista de la Nueva España.
Y fue precisamente en Coyoacán donde se realizó dicho festín, tras la captura de Cuauhtémoc y la caída del Imperio.
Eso según la historia. Y como toda alcaldía tiene su taquería consentida por los lugareños, nombraré algunas de las más representativas. Empiezo con Coyoacán, la cuna de los tacos de carnitas. ¿Quién no ha degustado los de buche en El Venadito? Estar en ese lugar parece que el tiempo se congeló en los años sesentas. ¡La calidad de sus carnitas es magnífica!
Aquí tan sólo una parte de mi recorrido taquero:
Mi lindo Michoacán, muy emblemática en la Del Valle, en Romero de Terreros. Aquí los más rifados son los de achicalada.
¿A chirrión y ustedes dirán que es eso? Es lo que queda al fondo de la cazuela: todo lo que se desprendió de la cocción de las carnitas- maciza, cuero, nana, buche- un verdadero manjar que se disfruta en taco o gorditas.
Pero para que la cuña apriete, no hay como Los Kuinitos, ubicados en la calle de Uxmal. Aquí no hay que ser adivino para escoger. Los meros, meros son los tacos de costilla con hueso, y las gloriosas gorditas de carnitas, acompañadas de la salsa roja, imperdible, que a más de uno de los comensales vemos sudar con singular alegría.
Así es que si andan de antojo, vayan por unos de maciza, buche, oreja, trompa, costilla, cuero , buche o nana. Al fin y al cabo, todo cabe en un taquito.
¿Oinc toy? Nos vemos pronto. ¡Qué tengas un gran año!
