De cara al regreso a clases, el Laboratorio de Datos contra la Obesidad (LabDO) señaló que es primordial mejorar la educación alimentaria de los escolares, toda vez que en México el sobrepeso y la obesidad afectan a uno de cada 20 niños de 5 años y a uno de cada 3 entre los 6 y 19 años.
Por ello, también resulta fundamental incentivar la actividad física; mejorar la educación alimentaria (para tomar mejores decisiones, consumir porciones adecuadas y sin excesos); prestar atención a la salud mental de los menores, que por meses han estado confinados a causa de la pandemia, así como vigilar que la prohibición de venta de comida chatarra, tanto al interior como al exterior de los planteles.
De acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), son las niñas y niños mexicanos los más propensos a sufrir sobrepeso y obesidad, con una tasa de 37.7% y 31.4%, respectivamente, circunstancia que los hace mayormente vulnerables a diversas afecciones crónicas, incluida la diabetes tipo 2.
Así mismo, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés), advierte que uno de los varios factores que provoca el desarrollo del sobrepeso y obesidad en menores de dad es el desbalance que deriva de un consumo excesivo de calorías a partir de productos ultraprocesados con azúcares, sodio y grasas añadidos.
Ante este panorama, la OMS recomienda, implementar una dieta equilibrada a base de frutas y verduras, así como alimentos frescos y naturales variados como trigo, maíz o arroz, lentejas o frijoles y algún alimento de origen animal, por ejemplo carne, pescado, huevos o leche.
De igual manera, llama a realizar actividad física, toda vez que contribuye a la prevención y gestión de enfermedades no transmisibles, reduce los síntomas de la depresión y la ansiedad, mejora las habilidades de razonamiento, aprendizaje y juicio, al tiempo que también asegura el crecimiento y el desarrollo saludable de niñas, niños y jóvenes.
Cabe señalar que estas medidas son parte de las acciones que las autoridades, iniciativa privada y ciudadanía deben impulsar para atajar el problema del sobrepeso y la obesidad, que deteriora la salud y es, en muchos casos, la antesala de otros padecimientos como enfermedad isquémica del corazón, hipertensión, dislipidemias, daños cerebrovasculares y cáncer.
Fuente LabDO
